Cómo hacer natillas
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Las natillas son un postre de sabor muy rico, consistente en una crema a base de leche y huevos, no excesivamente espesa, aromatizada con canela o con otros sabores, como puede ser el cacao, la vainilla, el coco…
Es una receta casera por ser un dulce fácil de preparar con productos fáciles de adquirir, y su popularidad es tal que también han pasado a venderse preparadas por la industria agroalimentaria, listas para comer.
Sin embargo, como todo en cocina, tanto el sabor como la calidad de los productos, así como la ausencia de aditivos y conservantes, hacen a las natillas hechas en tu cocina una opción que merece la pena, como se puede comprobar a la hora de degustarlas. Te explicamos cómo hacer natillas en pocos pasos.
¿Que necesitas para hacer natillas?
- Medio litro de leche entera (500 mililitros)
- Cuatro huevos grandes -sólo las yemas-
- 75 gramos de azúcar o su equivalente en edulcorante
- 25 gramos de maicena o fécula de maíz o similar
- La piel de medio limón
- Una rama de canela
- Canela molida
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Instrucciones para hacer natillas
- Calienta la leche. Usa un cazo o una cacerola, mejor si tiene el fondo grueso, lo que ayudará a que no se pegue o tueste la leche en la base del recipiente. Pon en él casi toda la leche, unos 400 mililitros, menos una cantidad de alrededor de medio vaso, unos 100 mililitros. Ponla a calentar a fuego medio, y le añades varias tiras de la piel del limón, sólo la parte amarilla -usa para pelarlo un pelapatatas, lo que te facilitará la operación-, y la rama de canela.
- Batir. Mientras el cazo con la mayor cantidad de la leche se va calentando, en el medio vaso de leche reservado echa el azúcar, la maicena y las yemas de los huevos, dejando aparte las claras de estos -guárdalas en el frigorífico-, que podrás usar para otras recetas, o incluso para preparar un merengue para acompañar a estas natillas. Bate enérgicamente la mezcla, hasta que esta tome un color amarillo claro y tenga algo de espuma.
- Espesar. Cuando la leche del recipiente con la piel de limón y la canela sube y comienza a hervir, baja el fuego al mínimo y cuélala a otro recipiente para retirar las pieles de limón y la rama de canela. Vuelve a poner la leche hervida en el cazo y vierte inmediatamente en él el medio vaso con la mezcla de leche, azúcar y yemas de huevo, y ponte a remover todo con una varilla manual de batir, sin parar en ningùn momento, hasta que poco a poco veas que las natillas se van espesando. Es importante remover de forma constanta para que las natillas no se corten o no cuajen adecuadamente, o que puedan formar grumos.
- Enfriar y reservar. Una vez que las natillas se han espesado y han adquirido la consistencia deseada -piensa que al enfriarse se terminarán de espesar-, ponlas en los cuencos, tazas o boles individuales que prefieras, o todas las natillas en una sola fuente. Écha en la superficie de las natillas de cada cuenco -o de la fuente- una pizca de canela espolvoreada. Tápa cada recipiente individual o en la fuente con film plástico, lo que evitará que se endurezca la superficie con una capa o costra. Deja que se enfríen las natillas a temperatura ambiente, y cuando ya estén frías resérvalas en la nevera hasta el momento de servir. Deberán estar al menos un par de horas para que se enfríen bien, se espesen y para que se asiente el gusto, con lo que tendrán un sabor más acentuado, y por tanto, más sabroso.
Consejos para hacer natillas
- Las natillas más clásicas se han servido tradicionalmente con una galleta maría encima, que se coloca justo en el momento de ponerlas a enfriar. Otra variante es poner una magdalena desmigada en el fondo o trozos de bizcocho. También las puedes acompañar con nata montada, merengue o siropes variados.
- Las natillas caseras son un postre, tentempié o merienda del agrado general que están muy ricas preparadas tal como te acabamos de indicar, pero tienen la posibilidad de muchas variantes. Se les puede añadir coco rallado, cacao en polvo, café instantáneo… De la misma manera, puedes añadir antes de poner a enfriar unas nueces muy picadas, u otro fruto seco que te guste.
- La piel de limón la puedes sustituir por piel de naranja, y la canela en rama la puedes cambiar por una vaina de vainilla o poner ambas. O puedes usar esencia de vainilla o vainillina para darle este sabor a la leche.
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