Economía de Escala – Todo lo que has de saber

Aquellas empresas que tienen una cadena de producción masiva tienen el objetivo de reducir los costes al máximo. Para ello tratan de buscar estrategias a través de las cuales puedan conseguirlo, siendo una de ellas la economía de escala, que contribuye a obtener una mayor eficacia a nivel productivo.

La economía de escala se trata de un modelo utilizado en el ámbito empresarial para tratar de optimizar los costes y conseguir un mayor rendimiento operativo de la empresa. Para ello invierte para que se incremente el número de productos fabricados en cada serie, además de para que los costes de reproducción se reduzcan.

Cuando se aumenta el rendimiento de una empresa, y se reducen esos costes, se consiguen incrementar los beneficios, además de poder gozar de una ventaja frente a la competencia.

Es habitual que se confunda con la economía de alcance, aunque realmente las diferencias entre ellas son evidentes. Mientras que la de escala se encuentra centrada en estrategias para poder reducir costes a través del incremento de la producción, la segunda está basada en las líneas de producción.

Características de la economía de escala

Una economía de escala se encuentra caracterizada de la siguiente manera:

  • La reducción tiene lugar en lo que es el coste unitario, no en el total. Este último puede llegar incluso a ser más elevado, en función del número de unidades fabricadas.
  • Permite alcanzar acuerdos más económicos con los proveedores. De esta manera, cuánto mayor sea el volumen de los pedidos, se consigue un mejor precio. Asimismo, también permite conseguir contratos a largo plazo, lo cual al mismo tiempo hace que se puedan reducir los costes por unidad.
  • Se puede conseguir una mayor confianza por parte de los inversores, que ayudan a la hora de destacar sobre la competencia.
  • Es un modelo que se encuentra concebido para las grandes empresas, con capacidad para poder adoptar grandes inversiones. En este sentido se piensa en beneficios a medio o largo plazo.

Tipos de economía de escala

Existen dos tipos de economía de escala, que son los siguientes:

Economía a escala interna

Esta economía de escala es promovida desde el propio interior de la empresa. Por norma general son miembros de la propia dirección de la compañía quien se encarga de liderar el proyecto. A partir de ahí comunica sus medidas al resto de los departamentos que la conforman.

El objetivo de esta economía es invertir menos dinero pero al mismo tiempo conseguir incrementar la producción.

Economía a escala externa

Por su parte, la economía a escala externa viene dada por motivos que son ajenos a la propia empresa. Esta puede deberse por diferentes circunstancias políticas, geográficas o culturales, entre otras, unos motivos que pueden repercutir de forma positiva a la compañía para que haga la inversión oportuna.

Hay que tener en cuenta que cuánto mayor sea la empresa, esta podrá disfrutar de una mayor eficacia en su producción, y esto deriva en ventajas a nivel competitivo.

La reducción de costes en la economía de escala

Existen diferentes factores que hacen que el coste de un producto por unidad pueda descender al mismo tiempo que la producción se incrementa. El concepto de economía de escala se puede utilizar para planeamientos a largo plazo, haciendo referencia a las reducciones en el coste unitario personalizado.

Para poder desarrollar la mencionada reducción de costes, las fuentes habituales de las empresas son:

  • Inventario: Para comprar los materiales y producto en grandes volúmenes mediante contratos a largo plazo.
  • Gestión: Este es otro de los pilares, estando enfocado a incrementar el nivel de especialización de los gestores.
  • Financiamiento: Obtener costes de un interés menor para la financiación de los bancos.
  • Tecnología.
  • Mercadotecnia.

Cada uno de estos factores se encarga de reducir el coste medio a un plazo largo de la producción. El hablar de economía de escala es realmente útil a la hora de poder explicar fenómenos que tienen lugar en el mundo actual, como es el caso de los patrones de comercio internacional o el número de empresas que se encuentran presentes en el mercado.

De hecho, este tipo de economías tienen un papel de máxima relevancia a la hora de hablar del monopolio natural.

Monopolio natural

El monopolio natural es la empresa que cuenta con economías de escala para todos los tamaños razonables. Para una empresa es más eficiente expandirse que para otras poder llegar a este mercado, ya que el monopolio natural carece de competencia.

Al no tenerla, esto hace que pueda tener un gran poder de mercado. De esta manera es habitual que las industrias que han recibido esta consideración sean reguladas o bien estén mantenidas en propiedad pública.

En este sentido es importante tener en cuenta que existen una serie de condiciones que, de manera natural, favorecen la formación de este tipo de  monopolios, como e el caso de las siguientes:

  • La empresa tiene capacidad suficiente para abastecer a todo el mercado.
  • La infraestructura de producción permite tener suficiente capacidad para poder producir sin problema gracias a unos costes decrecientes.
  • Existe un nivel de inversión muy alta.
  • El uso de patentes que protegen innovaciones tecnológicas, lo que hace que les proteja durante un tiempo de sus competidores.
  • Uso de recursos naturales que tan solo se encuentran presentes en algunos lugares del mundo. Esto provoca que para otras personas sea complicado poder entrar a competir por la escasez de los mismos.

Por todo ello se favorece que se genere un monopolio natural.

 

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