Cómo amasar
En platos de comida como platos de reposterías, pizzas y demás, amasar es una de las cosas más importantes que existen a la hora de poder desarrollar ese plato de la manera correcta.
Amasar consiste en hacer una masa compuesta por harina y levadura, con el fin de que la masa consiga una forma y un estado correcto para estos platos. Esta masa luego se utiliza como base de las pizzas, para hacer pasteles o incluso para hacer una simple barra de pan.
Siempre hemos visto a los maestros en el arte de amasar como personas con un don extraordinario para realizar masas, como si eso estuviera solo al alcance de unos pocos maestros en el mundo.
Esto no es cierto, ya que realmente cualquiera que tenga un poco de conocimiento culinario y sepa un poco del tema, puede hacer una masa de calidad para cualquier plato.
Sin embargo, esto no debe malinterpretarse, ya que es necesario saber cómo hacerlo correctamente si no queremos que nos quede una masa de mala calidad. Realmente la habilidad y los conocimientos en cocina son los que marcan la diferencia entre una buena masa y una masa que es un desastre.
Lo malo es que en casi ningún sitio nos enseñan a amasar, ya que realmente solo amasan los panaderos, los pizzeros y los reposteros , ya que la mayoría de la gente compra la masa ya hecha.
Hacer nuestra propia masa es mucho más barato, mucho más sano y mucho más delicioso que comprar la típica masa congelada o sintética que venden en las reposterías de bollería industrial.
Si quieres aprender a hacer masa correctamente y sin ninguna dificultad, estás en el lugar correcto, ya que desde recetas doncomos te voy a enseñar como puedes aprender a amasar y así poder crear una masa rica y apta para todo tipo de platos como pizzas y repostería.
¿Que necesitas para amasar?
- Un rodillo para amasar.
- Harina.
- Levadura.
- Agua.
- Sal.
Instrucciones para amasar
- Prepararlo todo:
Antes de comenzar a realizar la masa, tenemos que tener en cuenta que debemos trabajar en un lugar limpio, desde el que podamos trabajar a gusto sin que se mezcle la masa con suciedad u otros alimentos que haya en tu cocina. En primer lugar, prepara una superficie sólida, como una mesa de cocina, la cual debe de estar completamente limpia de suciedad y después, debe tener un poquito de harina por encima con el fin de que no se quede la masa pegada cuando vayamos a hacerla, ya que sino se quedará pegada y luego costará mucho manipularla al amasar con nuestras manos. También tenemos que prepararnos nosotros mismos, lavándonos correctamente las manos para evitar trasmitir microorganismos infecciosos a la masa y también llevando la ropa adecuada, ya que obviamente nos vamos a manchar., así que usar un delantal es una buena opción.
- Mezclar los ingredientes:
Ahora ya es hora de comenzar mezclando un poco los ingredientes que hemos preparado para hacer la masa, es decir, harina, levadura, agua y sal. En primer lugar, vamos a ir echando los ingredientes en el interior de un bol o un recipiente listo para usar, es decir, que también esté completamente limpio igual que lo está la mesa. Ahora es turno de remover lentamente los ingredientes, para lo cual usaremos una cuchara de madera de las que puede haber en cualquier cocina del mundo. Debemos remover suavemente, hasta que la masa quede completamente homogénea, es decir, hasta que todo sea más o menos igual de tamaño, forma y color.
- Comenzar el amasado:
Ahora es el turno de comenzar el amasado de la masa, es decir, que vamos a proceder al proceso más importante de esta receta de hoy. Lo primero que debemos hacer es coger la masa con las manos del bol y ponerla encima de la mesa.No te preocupes por la masa, ya que al haberlo mezclado todo, se va a hacer una pasta que se va a poder coger con las manos sin que se caiga. Una vez la tengamos ahí, ya podemos comenzar con el proceso de amasado, para lo cual vamos primero a juntar la masa haciendo una especie de bola en el centro de la mesa.Ahora vamos a golpear la masa, es decir, a darla unos cuantos golpes para que la masa empiece a compactarse y la harina haga su efecto.
- Terminar el amasado:
Una vez hayas golpeado la masa durante un par de minutos, ya es el turno de pasar al amasado de verdad,es decir, que vas a coger la bola y la vas a amasar con las manos, dándola la forma que quieras, como si fuera plastilina. Debemos hacerlo con mucho cuidado de que la bola siempre esté junta. Ahora vamos a notar como la bola va a empezar a estar cada vez un poquito más unida y que ya no se va a caer. Debemos seguir amasando durante un tiempo determinado, que suele estar comprendido entre 5 y 10 minutos. La forma de saber que hemos terminado es dejar la masa en una forma determinada, la cual se debe mantener si la masa está bien amasada. También se notará por el color, ya que la vamos a ver más blanca y ya sin tanto polvo harinoso dentro de ella, con una textura algo más lisa. Otra forma que tenemos de saber que la masa está lista es apretar ligeramente con el dedo, ya que si la masa recupera la forma original es que está lista, pero si no lo recupera, es que todavía le queda tiempo de amasado y por ello, debemos continuar durante un tiempo amasando hasta que por fin consiga estar en una forma completamente compacta, ya que es la única forma ideal de masa que existe.
- Esperar a que la levadura haga su efecto:
En la mayoría de recetas que usan masa, debemos esperar durante una hora o dos a que la levadura haga su efecto. Este efecto de la levadura hará que la masa se hinche y que forme una especie de pelota hinchada, la cual es mucho más grande que antes. Durante este proceso deberemos dejar la masa reposar tranquilamente en un lugar fresco y seco, sin que nosotros intervengamos en ningún momento en el mismo proceso, ya que si tocamos la masa por alguna razón, la levadura no va a hacer su efecto y la levadura no va a crecer.
- Usar la masa para tu receta favorita:
A partir de ahora, ya tomaréis caminos separados según la receta que quieras hacer, ya que según la receta que tengas, deberás hacer una cosa u otra. Si por ejemplo vas a hacer una pizza, lo que tienes que hacer es coger el rodillo y aplastar la masa para la forma de la pizza, echar los ingredientes y finalmente hornear. En otros platos como un molde de repostería, se debe partir la masa en trozos y moldearlos todos en la forma que quieras para después hornear. Si vas a hacer pan, deberás hacer la forma de la barra de pan y finalmente hornear para que acabe haciéndose. En definitiva, que sigas la receta correspondiente pero cambiando la masa congelada por esta masa casera que has hecho.La cosa es que ya tenemos lista nuestra masa casera, una masa sana, una masa natural y una masa con un precio más bajo que la masa que podemos encontrar congelada en supermercados.