Cómo cocinar brócoli
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Una parte esencial de nuestra dieta es cómo cocinamos lo que nos comemos, ya que de eso depende que aprovechemos mejor los alimentos. Hay muchas dudas en el mundo de las verduras, sobretodo cómo cocinar brócoli, la verdura con mayor ventajas para nuestra alimentación.
Siendo el principal miembro de la familia de las verduras de hoja verde, la palabra “brócoli” significa “rama” o “brazo” para los tallos en forma de mini árboles que llevan las flores. En este grupo podemos encontrar también coliflor, coles de Bruselas, repollo y col rizada, y utilizar cómo cocinar brócoli para cocinar estos alimentos.
El brócoli es una comida popular de los antiguos romanos, ya que crecía silvestre en las orillas del mar Mediterráneo. Su uso podemos remontarlo al siglo XVI en Francia e Inglaterra y, comenzó a comercializarse en EE.UU en la década de 1920.
Tenemos que tener en cuenta que nos encontramos ante una verdura de la que existen varios tipos. Podemos encontrar el conocido como “brócoli chino”, que tiene hijas anchas, una cabeza más pequeña y tallos largos y crujientes. Por otro lado, nos podemos encontrar con los brócolis rappini, con menos floretes y un sabor de mostaza. O una mezcla de brócoli y coliflor, que tiene un verde más pálido con cabezas más parecidas a la coliflor pero con un sabor más a brócoli.
¿Qué beneficios obtenemos si sabemos cómo cocinar brócoli?
Tenemos que tener claro que, cuando comemos un alimento como el brócoli, de manera cruda, tenemos una serie de elementos nutricionales que obtendremos al 100 %. Es importante tener en cuenta que el brócoli es mejor cuando se come crudo, porque la cocción y el procesamiento destruye algunos de sus antioxidantes.
Esto no implica que no podamos o no sea bueno cocinarlos. Es bueno saber cómo cocer el brócoli ya que así conseguiremos un sabor que de manera cruda es diferente. También debemos saber que el brócoli tiene dos veces la vitamina C que contiene una naranja y, a su vez, casi tanto calcio como la leche entera. Contiene altas propiedades anticancerígenas y anti-virales debido a su contenido en selenio lo que mejora la capacidad de nuestro cuerpo para absorber todas las propiedades del brócoli al 100 %.
¿Que necesitas para cocinar brócoli?
• Una o más cabezas de brócoli (del tipo que prefiramos o más nos apetezca)
• Un cuchillo de cocina
• Equipos de cocina, ya sea para cocer o tostar nuestro brócoli.
Instrucciones para cocinar brócoli
- Cortar los brócolis: debemos cortar nuestros brócolis a través del tallo, tan cerca de la corona como podamos. Esto nos permitirá poder obtener piezas del tamaño de una mordedura nuestra. Separa las “flores” u hojas del brócoli del tallo para conseguir cortarlo todo lo fino que puedas, con cuidado para evitar que puedas sufrir algún corte en nuestras manos. Colócalos en un tazón y ponlos bajo el agua para lavar cualquier tipo de arenilla o tierra que pueda estar incrustada en los brócolis, para conseguir que desaparezca y queden totalmente limpios.
- Recortar y cortar el tallo de nuestros brócolis: el tallo principal del brócoli es totalmente comestible y tiene grandes propiedades para nuestro organismo y muchos nutrientes que podemos aprovechar. Recorta las hojas, quita si quieres la capa más resistente y exterior del tallo, aunque no es necesario y tampoco perdemos nada que sea importante para nuestro cuerpo. Corta la parte más inferior del tallo y deséchala, ya que suele ser la menos sabrosa. Corta el resto del tallo en discos, ya que llevan más tiempo para ser cocinado que las hojas del brócoli. Colócalos bajo el agua y lava todo bien para quitar cualquier tipo de tierra.
- Guisar el brócoli: prepara un tazón de agua con hielo y colócalo al lado de una olla grande con agua hirviendo y otra vacía. Añade una cucharada de sal en la que tiene el agua caliente. Ahora es el momento en el que debes añadir las “flores” del brócoli en el agua caliente durante 1 minuto o dos cómo mucho. Ese es el momento para retirar con una cuchara o un colador (para deshacernos del agua) y poner rápidamente en el agua helada el brócoli que hemos sacado del agua caliente. Vuelve a poner agua caliente e introduce el tallo hasta que estén tiernos, durante 2 minutos, y repite el proceso. Si quieres que estén un poco más tiernas, déjalas 30 segundos más.
- Al vapor en el micro: coloca las hojas y los tallos en un plato que sea seguro para el uso del microondas y echa 2 o 3 cucharadas de agua por encima. Cubre con un plato de cena, es decir de mayor tamaño, y poniendo el microondas en alta potencia durante 3 o 4 minutos tendremos nuestro brócoli preparado. Retira la tapa con cuidado y verifica que tu verdura está blanda. Si prefieres, puedes hacerlo en intervalos de 1 minuto para estar más seguro y conseguir el punto que quieres.
- Salteado: con el brócoli lo más seco posible, coloca una pequeña película de aceite en la sartén y colócala a fuego alto o medio-alto. Añade primero las hojas y un poco de sal, mezclándola bien con el aceite. Añade, un minuto más tarde, los tallos para continuar cocinando y revolviendo con frecuencia, hasta que todo el brócoli sea del mismo color verde brillante y esté igual de tierno. Presta mucha atención porque tiene gran facilidad para que se pueda quemar, por lo que debemos estar atentos y no utilizar mucho aceite, y si es aceite de oliva mejor.
- Tostar nuestro brócoli: debemos calentar nuestro horno a 425º F o 218º C. Tenemos que secar al máximo nuestro brócoli antes de introducirlo en el horno. Mezcla en la bandeja del horno, de manera salteada, las hojas con los tallos, y echarles unas cucharaditas de aceite y media cucharada de sal. No olvides poner papel de aluminio en una sola capa de la bandeja, preferiblemente en la parte de abajo de la bandeja y poner el brócoli encima. Asar durante 20 a 25 minutos, hasta que nuestro brócoli esté crujiente y podamos ver manchas marrones caramelizadas. Podemos añadir queso por encima o patatas para que se asen junto a nuestros brócolis.
Consejos para cocinar brócoli
• No cocines excesivamente el brócoli, ya que esto puede hacer que se separe, pierda su color y su sabor y, además, perdamos nutrientes importantes.
• Si agregamos brócoli a una ensalada fría, lo mejor es que lo guisemos, mejor que saltearlo o hacerlo de otra manera, ya que conservaremos mejor sus nutrientes.
• Podemos mejorar el sabor del brócoli con mantequilla, jugo de limón, orégano, tomillo, estragón, albahaca, etc.
• Para crear un plato sabroso de verdad, podemos cubrir el brócoli con una salsa de queso si hacemos nuestro brócoli al horno.
• Al seleccionar el brócoli, tenga en cuenta que cuento más fuerte es su olor, más viejo es.
• Pelar la capa exterior del tallo de nuestro brócoli conseguirá que mejore nuestra digestión de esta verdura.
• Tirar unos trozos de pan en el agua caliente al cocinar nuestro brócoli puede ayudarnos a eliminar el olor si es lo que más nos echa para atrás a la hora de comérnoslo.
• Es un perfecto ayudante para los batidos rápidos y verdes, acompañado de acelgas, pepino, etc.
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