¿Qué es una CPU y para qué sirve?

El término CPU, que hace referencia a la Unidad Central de Procesamiento y que proviene del inglés «Central Processiting Unit»,se refiere al microprocesador interno del ordenador.

Sin embargo, hay personas que utilizan la palabra CPU para referirse a todo el conjunto del PC, algo que es incorrecto. Lo es puesto que dentro de la torre o caja del ordenador hay más componentes de hardware que el microprocesador (CPU).

La CPU es un componente muy complejo que se encuentra dentro de un dispositivo y que se puede catalogar como su «cerebro», una pieza imprescindible sin la cual no es posible de funcionar.

En esta ocasión te vamos a explicar todo lo básico que debes conocer al respecto de su funcionamiento, de manera que puedas entender qué es la CPU y para qué sirve en un ordenador u otro tipo de dispositivo.

Qué es la CPU

La CPU es uno de los componentes principales de un ordenador, tablet, smartphone u otro equipo electrónico. Sin él no serán capaces de funcionar.

Se le conoce habitualmente como procesador o microprocesador y es el encargado de procesar todas las instrucciones del dispositivo. Para ello se encarga de leer las diferentes órdenes que le llegan y los requisitos existentes, además de las propias instrucciones de los componentes que conforman el equipo y sus respectivas aplicaciones.

Este componente se encarga de que el funcionamiento sea correcto, interpretando toda la información que recibe para realizar los cálculos y establecer las conexiones oportunas. Además cuánta mayor potencia tenga, más rápido puede hacer sus operaciones. Esto hará que el PC funcione de una mejor manera, de forma más rápida.

Asimismo, la CPU se encarga de la lectura, interpretación y procesamiento de las instrucciones del sistema operativo en primer lugar y luego hace lo propio con las aplicaciones instaladas en el equipo.

De esta manera, el ordenador cuenta con una CPU que está dedicada a llevar a cabo cualquier operación o proceso requerido por parte del sistema. En el caso de los móviles disponen de un chip llamado SoC que dispone del CPU y otros componentes integrados en el mismo elemento, como son los chips gráficos.

Cómo es una CPU

El tamaño de la CPU acostumbra a ser reducido, tener una forma cuadrada y disponer de conectores y pines metálicos. De forma general está instalada en la placa base del ordenador. Para ello cuenta con un zócalo especial localizado en ella. Al no ir soldado a la placa es posible cambiar la CPU por otra que sea compatible con esa placa base si se desea.

Cada CPU tiene al menos un procesador o núcleo en su interior. Estos son los chips para llevar a cabo las operaciones y cálculos. Sin embargo, aunque en sus orígenes solo tenían uno, en la actualidad este tipo de elementos cuentan con varios núcleos. De hecho, en la actualidad hay modelos con más de 12 núcleos.

El número de núcleos o procesadores de una CPU hacen que esta pueda llevar a cabo una mayor o menor cantidad de operaciones de forma simultánea. No quiere decir que por tener más sea más rápido, ya que esto también dependerá de cómo sean los núcleos.

Esto depende de la tecnología que lleven integrada además de la frecuencia del procesador, que se indica en GHz (gigahercios). Esta es la que indica el ritmo con el que funciona el procesador. Este ritmo viene determinado por la capacidad del núcleo para poder realizar una mayor cantidad de acciones por minuto.

De esta manera, es importante tener en cuenta el número de procesadores o núcleos, pero también su frecuencia de reloj.

Para qué sirve la CPU

Una vez explicado todo lo anterior, te podemos explicar para qué sirve la CPU. Esta es la encargada de ejecutar las instrucciones y procesar los datos del ordenador. Estas secuencias son las que se llevan a cabo por parte del software instalado en el ordenador.

De esta manera, según lo que tú solicites a un programa, la CPU se encargará de hacerlo realidad. Una vez indicas una acción, está instrucción llega a la memoria RAM, donde se recogen por parte de la CPU, que es la que la ejecuta.

Este proceso se lleva a cabo a través de varios pasos: En primer lugar se leen los datos e instrucciones para cada una de las aplicaciones. Luego los datos son decodificados y se dividen para que los entiendan las partes de la CPU encargadas de realizar los cálculos y ejecutar las acciones. Una vez hecho esto los escriben en la memoria principal.

Cada programa puede necesitar de varias instrucciones en una misma acción. La CPU se encarga de hacerlas pero no las realiza en orden, ya que al mismo tiempo puede estar realizando operaciones y cálculos para diferentes programas que se encuentren activos en ese momento.

De esta manera, la CPU actúa como cerebro del ordenador, pero no realiza todas las funciones, ya que para algunas depende de otros componentes. Por ejemplo, se apoya en la tarjeta gráfica para que esta se encargue de todo lo relacionado con el monitor y lo mismo ocurre con otros componentes.