Todo sobre la siembra de tomates

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Consejos

Prácticamente a todo el mundo le gusta comer un buen tomate. Tal vez a unos les gusta el tomate para untar el pan y comerse un buen pan con tomate (pà amb tumàquet) como en Cataluña, o un tomate confitado o decorando las ensaladas, como es el caso de un gracioso tomate cherry. O en dietas saludables, comer crudos los tomate cherrys. Lo mismo puede ocurrir con las mermeladas de tomate, las salsas… ¿pero y si puedes hacerlo con tus propios tomates, recién cogidos de la huerta?

Os explicaremos lo más básico y lo necesario para poder plantar tomates mediante semillas. Sin dejarse un dineral en preparar una huerta, ni comprar grandes semilleros ni complicaciones.

Instrucciones

Para seguir a rajatabla y a pies juntillas el cuando es la mejor época para poder sembrar tomates, lo realmente ideal será, en primavera. Pero cuidado, porque esta hortaliza, el tomate, por lo general, puede cultivarse durante todo el año si se tiene paciencia y ciertos cuidados.
De hecho, puede cultivarse mediante el método de la semilla y hacerlo en otoño e invierno y que los tomates puedan salirte sin problemas si se protegen del frío. Lo más adecuado será en estos casos, poder cultivarlos dentro de un invernadero. De esta manera, el calor del invernadero hará que ayude a florecer antes y por otra parte, lo protegerá del frío, de las heladas, la lluvia y el agua excesiva, etc.
También en caso que os encante comer tomates, podéis probar a plantar diferentes tipo de tomate. Si, diferentes clases de esta hortaliza. Porque los hay que por ejemplo, son idóneos para primavera, otros para verano, para otoño, etc.
Los diferentes tipo de tomate que pueden encontrarse son muy diversos, porque hay muchos, pero los más utilizados o los más famosos, así a priori, pueden ser: el tomate Raf, el tomate cherry, el tomate de rama, los tomates negros, el Kumato, etc.
Hay que tener en cuenta, que cada tomate tiene sus propiedades y que hay algunos que por ejemplo, aguantan mucho mejor las inclemencias y pueden sembrarse y florecer durante el otoño e incluso en invierno, otros cuestan mucho más porque necesitan sol y calor… y en cuanto a los tomates y sus clases, algunos son más adecuados para una cosa u otra. Desde el típico tomate pequeñito que es idóneo para decorar, el tomate para el pan, el tomate para las ensaladas, el tomate para cocinar, el tomate para hacer conservas y salsas, etc.

También hay algunos tomates que son más caros que otros. El más económico podríamos decir que es el tomate cherry y de los tomates más caros, el tomate rosa o también el llamado tomate Raf.
Y bien, ahora vamos a ponernos en la situación de que queráis tener vuestro propio huerto en vuestra casa o inclusive, se puede también tener en pequeños tiestos, en macetas o invernaderos (que ahora está de moda y son tendencia).
Dependiendo de la época en la que se planten las semillas, se deberá tener en cuenta si se hace un huerto de verano o de invierno (llamados de esta manera por la inclemencia del tiempo). En caso de que por ejemplo se decida hacer un huerto de primavera o de verano, es más idóneo hacer un huerto que esté al aire libre. En caso de huertos en otoño y de invierno, lo idóneo es hacer el huerto dentro de un invernadero. De este modo, se protegerá la cosecha de las heladas, de los fríos (que no van bien con el crecimiento de esta hortaliza), de las lluvias intensas, el aire…
Con un exceso de frío o vientos muy intensos, las tomateras se morirán o se echarán a perder. Y con frío o heladas, se congelan y se muere. Por tanto, si tenéis la plantación ya hecha pero obviamente, no podéis colocar un invernadero o no lo podéis comprar o no tenéis el espacio para colocarlo, no os preocupéis. Algo que puede hacerse y que sirva como si fuera casi lo mismo, es colocar plásticos y tapar con ello las tomateras. Con esto conseguiréis que tengan calor las hortalizas y evitar lo máximo posible que se hielen o el golpe de las lluvias sobre las hojas y puedan partirse o caerse los tomates. Pero claro, para por ejemplo, el granizo, tal vez, tendréis que tener preparado siempre, algo que pueda colocarse sobre las tomateras y de esta manera, evitar lo máximo posible los impactos sobre los tomates.
Hay que calcular que preparar un huerto de tomates y que las semillas empiecen a brotar, dependerá de la temporada (en verano con el calor tarda menos en brotar) pero aproximadamente, podrás empezar a ver sus flores amarillas (el proceso es semillas, tomatera, flores amarillas y al caer la flor está la hortaliza pequeñita que es el tomate) a las tres semanas.
Para plantar mediante semillas, puedes echar mano de un semillero o no. Seguramente en una jardinería o tienda de flores te dirán que sí y te venderán un montón de productos para que lo compres. Pero no es necesario. El semillero puedes hacerlo tú mismo/a en tu casa. O bien plantarlo directamente tú mismo en una maceta o tiesto. Si, directamente. No hay problema.
Compras una tierra que tenga eso sí, un buen compostaje que la tierra a poder ser con un porcentaje alto de potasio en su abono. Si vas un poco perdido/a en estos temas, fíjate a la hora de comprar la tierra, que el saco sea tierra para cultivar hortalizas. En estos casos, la tierra ya lleva su abono y de esta manera te ahorras hacerlo por ti misma/o y comprar más productos de la cuenta o quemar las semillas por exceso de abono.
Una vez que la tomatera crezca, por lo general, habrán hojas que se queden secas y viejas. En este caso, para intentar evitar plagas y de paso, que sea más fuerte la tomatera y a modo de poda, lo idóneo es cortar, eliminar, quitar, estas hojas. De esta manera, la base de la tomatera crecerá más fuerte y alta y el resto de las ramas no le quitarán fuerza a la tomatera y saldrán tomates más grandes y sanos.
Dependiendo de la época en la que se planten las semillas, se deberá tener en cuenta si se hace un huerto de verano o de invierno (llamados de esta manera por la inclemencia del tiempo). En caso de que por ejemplo se decida hacer un huerto de primavera o de verano, es más idóneo hacer un huerto que esté al aire libre. En caso de huertos en otoño y de invierno, lo idóneo es hacer el huerto dentro de un invernadero. De este modo, se protegerá la cosecha de las heladas, de los fríos (que no van bien con el crecimiento de esta hortaliza), de las lluvias intensas, el aire…
A medida que las semillas empiecen a brotar y crezca la tomatera puedes ir colocando palitos para ir enderezarlo o guiarlo. Cuando crezca y sea alto, deberás atarlo a una caña o palos. Puede servirte cualquier cosa que sea un poco robusto para que no se tuerce (palo de escoba, palo de madera, cañas, etc.). Lo mismo para atarlo, no atarlo demasiado fuerte para no ahogar la tomatera ni romperlo. Una cuerda, un cordón, una goma, etc.
El cuanto al tipo de riego, necesita un riego moderado y jamás tener la tierra encharcada o un exceso de agua. Además, podéis provocar si lo hacéis que se llene de hongos o se marchiten las hojas y tengáis las tomateras con plagas. En verano, con el calor, lo idóneo es que se riegue si podéis hacerlo, antes que salga el sol fuerte, por la mañana. Y a última hora de la tarde, si os dais cuenta de que la tierra vuelve a estar muy seca, volved a regar.

Consejos

Un truco que muchos piensan que nunca sale bien pero que es erróneo y sí se puede conseguir y además, gratuitamente, es aprovechar el comprar semillas y utilizar las semillas de un tomate que ya tengas. Esas semillas o un tomate que hayas utilizado, entiérralo dentro de la tierra (no a mucha profundidad) con un dedo abajo ya es suficiente. Y riega un poquito y que le de el sol. A las dos semanas, deberías ir viendo como empiezan a florecer las semillas. Y si lo has conseguido, enhorabuena, en pocas semanas tendrás tu propia tomatera.

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