Diferencia entre el pensamiento y el intelecto
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El ser humano es la corona de la creación. A pesar de haber una gran variedad de especies de animales y plantas con características únicas y sorprendentes, ninguna de ellas posee la facultad de razonamiento, una cualidad propia del ser humano.
Desde que se está en el útero materno, el feto comienza a recibir una serie de información que le permite identificar diferentes tipos de estímulos, como sonidos, movimientos, sabores, etc. De ahí que muchos médicos recomienden este tipo de interacción temprana.
Cuando el bebé nace, se abre ante sí un mundo de posibilidades. Comienza a escribir su propia historia a partir de toda la información que recibe a través de lo que ve, lo que escucha, lo que huele, lo que siente y lo que saborea.
Poco a poco, conforme va pasando el tiempo, se comienzan a madurar sus facultades y surgen los pensamientos, los cuales van siendo cada vez más concretos. No obstante, en este punto surge una gran interrogante, ¿diríamos que es lo mismo el pensamiento y el intelecto? ¿Existe alguna diferencia entre ambos?
Algunos filósofos y grandes pensadores de la humanidad opinan que sí, mientras que otros defienden la teoría de que se trata de una misma cosa, ¿qué opinas tú? ¿Te inclinas hacia algún lado o no tienes ni la más mínima idea?
Si te interesa tener claro el punto, en esta oportunidad, a través de este breve artículo, podrás saber si existen algunas diferencias y, de ser así, cuáles son. Esto te permitirá formarte una opinión propia, fundamentar tu teoría y contar con las herramientas necesarias a la hora de establecerse un debate sobre el tema.
Por ello, ¡que no se te vaya la olla! Presta mucha atención y continúa tu lectura para que no te pierdas ningún detalle importante sobre esta controversia. Veamos.
Instrucciones
Es la facultad de pensar. El término proviene de la palabra latina “pensare”, la cual hace referencia a la acción y el efecto de pensar. La palabra pensamiento hace referencia a toda aquella actividad creativa que se realiza usando la mente.
En otras ocasiones, esta palabra se usa para definir todos los productos que la mente puede llegar a generar, lo que incluye las actividades racionales del intelecto y las abstracciones de la imaginación. De hecho, todo aquello que está relacionado con la naturaleza mental es considerado como pensamiento, sin importar si son racionales, creativos, abstractos, artísticos, críticos, etc.
El ser humano tiene la capacidad de generar múltiples ideas al mismo tiempo. Por ejemplo, tener pensamientos positivos, negativos, de amor, entre muchos otros. De ahí que se afirme que el producto de la mente dependerá de las diferentes emociones que se tengan o se manejen en el momento.
Su función es la de interpretar todo lo que sucede en torno de la persona y buscar posibles soluciones a los problemas.
Principales características
Algunas de sus características son las siguientes:
- Son acumulativos.
- Se desarrollan de acuerdo al paso del tiempo.
- Actúan por medio de diferentes estrategias intelectuales que se van formando ellas y que se inclinan hacia la resolución de un problema.
- Son personales.
- Se desarrollan de acuerdo con las capacidades de cada persona.
- Funciona a través de la razón y, por lo tanto, es totalmente lógico.
Ahora que ya sabes lo que es el pensamiento, es necesario que sepas qué es el intelecto, a fin de que se pueda establecer una diferenciación entre ambos términos.
Que Necesitas
La palabra intelecto proviene del latín “intellectus”, la cual, a su vez, es una palabra compuesta por “inter”, que significa “entre”, y “lectus” cuyo significado es “escoger” o “escogido”. En una forma más amplia debemos decir que esta palabra expresa el raciocinio como una característica propia de los seres humanos.
En pocas palabras, el intelecto no es otra cosa que la capacidad que poseen las personas de comprender las cosas que pasan a su alrededor. De desarrollar distintas situaciones mentales, todas conectadas con la realidad y entre sí mismas.
Un sinónimo para la palabra intelecto es inteligencia. No obstante, también se puede referir a la reflexión o la razón, la cual se va desarrollando desde el nacimiento y concluye con la muerte. Esto quiere decir que el ser humano está en constante aprendizaje.
Características principales
- En cuanto a su estructura, comprende 5 operaciones especiales de la persona: la captación de la información, la memoria o la facultad de recordar cada hecho ocurrido en su vida, la evaluación o el análisis de las situaciones cotidianas, la solución de los conflictos y la creatividad.
- Con relación a su capacidad, abarca el entendimiento, el raciocinio y el análisis de todo lo que nos rodea. Lo que quiere decir que posee un alcance infinito y que se puede llegar a ampliar de acuerdo con los intereses que tenga la persona, utilizando diferentes mecanismos y estrategias para acceder a la información.
- Finalmente, en cuanto a su medición, existen diferentes tipos de test que hacen posible determinar el nivel de entendimiento o la edad mental de una persona. Por otra parte, es posible realizar un intelecto crucigrama con el fin de obtener resultados óptimos.
No obstante, existe un proceso de medición tradicional, el cual se basa en la división de la edad mental y la edad real de la persona que es objeto del estudio.
Cabe destacar que hay diferentes tipos de actividades útiles para incrementar el intelecto. Por ejemplo, la meditación diaria, la exposición a experiencias nuevas, realizar ejercicios físicos y mentales, aprender a tocar un instrumento musical, aprender otro idioma, conocer personas con características diferentes a las propias, etc.
Puesto que ya conoces lo que significa cada uno de estos términos, a qué hacen referencia y cuáles son sus principales características, tienes la capacidad de establecer una diferenciación entre ambos.
Consejos
La principal diferencia entre el pensamiento y el intelecto es que el pensamiento es la actividad y el producto de la mente, mientras que el intelecto o inteligencia es el resultado de la interacción de una serie de capacidades de la persona, las cuales están determinadas por sus rasgos biológicos, por los procesos psicológicos, su entorno social y su conducta.
El pensamiento es todo aquello que es traído a la existencia a través de la actividad del intelecto. Es una creación de la mente y lo poseemos desde muy temprana edad. Además, de acuerdo con las vivencias, los deseos y los sueños que tenga cada persona, estos pueden llegar a ser reales o imaginarios.
Por su parte, el intelecto es la capacidad propia del ser humano de entender, comprender y resolver diferentes tipos de problemas. Se va desarrollando de manera paulatina y conlleva a la realización, a corto o largo plazo, de los pensamientos.
En pocas palabras, aunque se trate de dos cosas diferentes, guardan una estrecha relación. De ahí que exista cierta ambigüedad a la hora de establecer las características opuestas de cada uno. Incluso, están tan estrechamente relacionados, que algunos filósofos son partidarios de la idea de que se trata de la misma cosa.
No obstante, basándote en el análisis de la información presentada, cada lector podrá establecer su propia teoría y llegar a una conclusión lógica que lo satisfaga.
Sin importar si es lo mismo o si son dos cosas diferentes, el pensamiento y el intelecto convierten al hombre en un ser único y lo posiciona por encima de las demás especies existentes.
El ser humano, empleando estas facultades, ha sido capaz de hacer grandes inventos, muchos de los cuales han trascendido los límites imaginados. Otros, han permitido resolver grandes problemas, como enfermedades, conflictos bélicos y la situación de pobreza de una nación entera.
Todo esto nos lleva a reflexionar en la capacidad del cerebro, el origen del pensamiento y del intelecto, y en todo aquello que nos falta por aprender, descubrir, crear, resolver, imaginar y vivir. En realidad, al hombre le queda todavía mucho camino por recorrer.
