Cómo cuidar un conejo

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¿Que necesitas para cuidar un conejo?
Instrucciones para cuidar un conejo
Consejos para cuidar un conejo

En la actualidad es muy común adoptar conejos como mascota, ese tierno animalito que además de bello es dulce y cariñoso. Los controles necesarios debe hacerlos un veterinario especializado en este tipo de mascotas. Al momento de comprarlo debes estar bien asesorado sobre las características y necesidades de tu mascota.

En Doncomos.com queremos darte las pautas principales para que sepas cómo cuidar un conejo.

Tienen su mayor actividad al atardecer y a la noche y son muy tolerantes en la convivencia con otros de su especie. Al conejo le gusta estar acompañado y en forma especial con otro de su especie. Lo ideal es que tengas dos, macho y hembra esterilizados si no quieres llenarte de bellos conejitos.

Entérate leyendo este artículo como debes cuidar a tu conejo para que esté sano y bien alimentado.

¿Que necesitas para cuidar un conejo?

Recinto grande y cómodo.
Heno, verduras y hortalizas permitidas y pienso para conejos.
Cepillo.
Vacunas

Instrucciones para cuidar un conejo

Lo más común es que un conejo viva alrededor de 10 años si recibe los cuidados necesarios aunque también puede llegar a muchos más. A los 5 meses ya tienen actividad sexual y como todos sabemos la reproducción es bien numerosa. Si piensas frenar la reproducción debes saber que las hembras deben esterilizarse antes de los dos años. Los machos deben castrarse para evitar agresiones y que su vida como mascota se desarrolle más tranquila.
El conejo nunca debe permanecer encerrado en una jaula porque necesita lugar para salir y entrar al lugar donde duerme. Necesita un mínimo espacio de 2 metros cuadrados para poder entretenerse, hacer ejercicio y sentirse libre.
Es muy común que el conejo coma las plantas del jardín, que roa la corteza de los arboles y muchas cosas que pueden ser peligrosas para el.
Es muy importante cuidar la temperatura del conejo, su temperatura corporal que es alrededor de 39ºC y la del ambiente que el soporta. Si vemos que hace demasiado calor podemos humedecerle las orejas. Debemos observar que el conejo actúe normalmente, si lo vemos desganado es posible que esté sufriendo por el calor.
Su pelaje debe ser cuidado, cepillado según si es de pelo corto o largo, Si tu conejo tiene pelo corto puedes cepillarlo 3 veces por semana pero si tiene pelo largo deberás dedicarle más tiempo y cepillarlo todos los días. El conejo se asea solo pero a la vez traga pelos en la época del cambio de pelaje, esos pelos sueltos que él traga pueden acumularse en el estómago lo cual es muy peligroso.

El alimento principal para un conejo es el heno. También deben comer verduras y pienso. Es bueno alimentarlos dos veces al día para ordenarlos y deben tener agua permanentemente para beber. Cuando comen heno desgastan sus dientes que están en constante crecimiento, por eso el heno debe ser de buena calidad para que puedan trabajar sus dientes rompiendo las hebras. El pienso debe ser elaborado para conejos, no para otros animales, no debe contener cereales por eso es que debe comprarse empaquetado para que sea confiable.
Entre las verduras, hierbas y hortalizas que puede comer puede ser acelga, apio, alcachofa, hinojo, trébol, hojas de zanahoria, de remolacha y diente de león.
Las frutas son un placer para los conejos pero para evitar que engorden demasiado es recomendable darle no más de dos o tres veces por semana.
Quedan prohibidas las siguientes verduras: coliflor, patata, cebolla, ajo. También quedan excluidos las semillas, frutos secos y cereales. Alimentos cocidos, lácteos, carne, etc.
El veterinario debe verlo al menos una vez al mes mientras el conejo es pequeño para controlar su peso, orejas, ojos y dientes, así como colocarle las vacunas. Estas son contra enfermedades comunes como la Mixomatosis, la Hemorrágica Vírica y la Pasteurella.
Puedes cortarle las uñas un poco para que no rasguñen al alzarlo, si no el veterinario lo hará con mayor facilidad.
El lugar donde habita tu conejo debe tener todas las comodidades necesarias como un bebedero en el que tenga agua limpia todo el tiempo. También necesita una cama hecha en base a paja o heno, nada de algodón o telas, un lugar donde pueda hacer sus necesidades. El recinto debe ser grande, más o menos 2 metros cuadrados por conejo, si tienes una pareja con 4 metros cuadrados estará bien. Debe poder salir, husmear y correr. Puedes dejarlo que explore la casa con cuidado para que no roa cosas que no debe, que no muerda cables o cosas peligrosas.
Puede relacionarse con otras mascotas si lo acostumbras desde pequeño.
Dentro del recinto debes colocar una bandeja donde hará sus necesidades, esta puede rellenarse con lecho higiénico o con viruta prensada. No debes colocarle las piedritas que se usan para los gatos ni viruta suelta porque le puede producir problemas respiratorios. Estas bandejas deben limpiarse diariamente, deben quitársele la humedad que tenga y una vez a la semana limpiarla con mayor profundidad.
Es necesario controlar los dientes del conejo, si la alimentación no es adecuada pueden crecer demasiado. No solo puedes evitarlo con la alimentación adecuada sino también dándole tronquitos de frutales para roer, esto hará que el desgaste de los dientes lo mantenga como corresponde.
No dejes de llevarlo al veterinario si ves que no ha comido por 12 horas, si no ha defecado por este mismo tiempo, si no ha orinado en 24 horas, si ladea la cabeza, si tiene costras en el interior de las orejas.
Los cambios en la alimentación deben ser graduales ya que los conejos son muy sensibles a los cambios en las dietas. Por ejemplo si compras el conejo y quieres cambiar de marca de pienso hazlo gradualmente, si vas a incorporar nuevas verduras y ya está acostumbrado a otras hazlo de a poco. Por más que creas que lo haces por su bien los cambios no deben ser bruscos.

Consejos para cuidar un conejo

En nuestra categoría de conejos encuentra más información sobre este precioso animal
Nunca encierres a tu conejo en una jaula pequeña, como cualquier mascota debe tener libertad y espacio.
No lo bañes, límpialo cuando sea necesario con un paño húmedo.
Aliméntalo correctamente dos veces al día.
Protégelo del calor excesivo.
Déjale cosas para roer: ramas de árbol, maderas, cartón.

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