Cómo es la comida andaluza
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Hay quienes les gusta mucho comer. Todo lo que se lleva a la boca, sin importar si se trata de algo dulce, salado, ácido, agrio o amargo, les produce una agradable sensación de placer y bienestar. Mientras que existen otras personas que disfrutan ser quienes generen estas experiencias.
Quienes nacen con el don de la cocina, suelen ser muy creativos, están dispuestos a aprender y a experimentar a diario, disfrutan su trabajo, aunque les tome horas realizarlo, y, en cada plato que cocinan, ponen todo su empeño y dedicación, sin importar si lo hace para sus familiares o para los comensales que frecuentan restaurantes costosos.
Ahora bien, la gastronomía es un área muy diversa. Cada país posee la suya. Lo que es mejor aún, cada región tiene una y, como es de esperarse, cada una de ellas cuentan con ciertas características especiales que la hacen diferente de las demás. De ahí, lo complejo y lo fascinante del asunto.
Si vives en España, puedes dar prueba de esta realidad, pues su gastronomía es muy rica y prolífera y, por supuesto, como es de esperarse, cada quien tiene su favorita. Sin embargo, para hacer una selección justa es necesario que conozcas cuáles son las características que conforman la gastronomía de cada región.
En este particular, a través de este breve post, te estaré hablando de una de las gastronomías más diversas y que se encuentra entre las favoritas de todos. Se trata de la comida andaluza. ¿Has tenido la dicha de probarla? Si no es así, luego de leer este post saldrás corriendo a buscar un lugar en donde probarla.
Asimismo, tendrás la gran oportunidad de recrear cualquiera de sus platos más emblemáticos en la intimidad de tu casa, para el deleite de tu paladar y el del resto de tu familia.
Instrucciones para la comida andaluza
La comida tradicional andaluza se caracteriza por contar con una gran variedad de productos, todo de excelente calidad. Debido a esto, su fama ha recorrido el mundo entero.
Debido a las diferencias culturales que existen entre los habitantes de la costa y los de la ciudad de interior, su comida cuenta con una gran variedad. Sin embargo, existen algunos elementos que tienen en común. Por ejemplo:
- El aceite de oliva. Este es un ingrediente fundamental. En contraste con otros tipos de aceite de uso comestible, el aceite de oliva es muy beneficioso para la salud ya que, entre otras cosas, cuenta con ácidos grasos libres.
- Las carnes. De todas ellas, sobresale su excelente jamón serrano, hecho con el cerdo ibérico criado en las sierras de Andalucía.
La exquisitez de este jamón radica, no solo en su sabor, sino también en su agradable aroma y en su textura. Todo esto es gracias a que las condiciones microclimáticas, en las que se elabora, son únicas. Además, los cerdos con os que se elabora son de raza ibérica y se alimentan solo con bellotas y pastos naturales.
Cabe destacar que estos animales se encuentran siempre en régimen de libertad. Por consiguiente, cuentan con las mejores condiciones para crecer sanos y totalmente aptos para el consumo.
- Los pescados. Puesto que Andalucía se encuentra conformada por cinco ciudades costeras, el consumo de pescados y mariscos es muy elevado.
- Los dulces. Nadie que visite la región puede resistirse a las deliciosas torrijas, típicas de la comida andaluza.
- Los vinos. Sus viñedos también gozan de gran popularidad. De hecho, la fama de los vinos de Jerez se ha extendido por todo el mundo, lo mismo que la manzanilla de Cádiz.
¿Que necesitas para la comida andaluza?
Haciendo un poco de historia, es necesario que sepas que la comida de Andalucía e el resultado de la combinación de varias culturas. Entre ellas, sobresalen la cocina árabe, la cultura tradicional mediterránea del olivo y la vid y los productos y condimentos de procedencia americana.
Su recetario es la unión perfecta entre lo antiguo y lo innovador. Está repleto de restos arqueológicos que llenaron las tierras de Andalucía. Tal es el caso de las salazones de pescado de los fenicios, así como el aceite de oliva y una gran variedad de verduras de origen romano y árabe. Sin dejar a un lado los frutos secos, las especias y los diferentes productos que llegaron de América.
Entre sus ingredientes más preciados, se encuentra el aceite de oliva. De hecho, se considera como el máximo responsable de la dieta mediterránea, y esto no es producto de la casualidad, ya que Andalucía es considerada como la principal productora de este producto en el mundo.
El aceite de oliva extra virgen forma parte del desayuno tradicional andaluz, pero también suele ser utilizado en su repostería, así como en el plato de mayor valor nutricional y de fácil preparación, que es el gazpacho.
En la actualidad, los restaurantes de comida andaluza se encuentran entre los más prestigiosos y son el foco central de la crítica más distinguida, lo que ha servido como referencia para situarse en el panorama culinario internacional como uno de los lugares de mayor interés en el turismo culinario. Por eso, cuando vayas a Andalucía, no debes de visitar uno.
Consejos para la comida andaluza
Si deseas probar la comida andaluza, lo mejor que puedes hacer es comerla en casa. Pero, si no te sabes una sola receta, no tienes de qué preocuparte. Estaré compartiendo contigo un par de ellas que son muy fáciles de preparar.
Una de las recetas emblemáticas de la gastronomía de Andalucía, es el famoso gazpacho. Aunque puede comerse durante todos los meses del año, si así lo quieres, suele ser más frecuente durante el verano, ya que se trata de una sopa fría.
Esta se encuentra elaborada con diferentes tipos de hortalizas, entre las cuales destacan el tomate, los pimientos rojos y verdes, el pepino, el ajo y, por supuesto, el pan. Con relación a este último ingrediente, suele usarse duro para remojarlo luego en agua.
Para su preparación, debes triturar muy bien todos los ingredientes. Luego, agrégales poco a poco aceite de oliva extra virgen, un poco de vinagre y agua.
Una vez que esté listo. Llévalo a la nevera, pues, como ya te he comentado, suele comerse frío. Sírvelo en un cuenco de barro o en un plato hondo individual, acompañado de la guarnición de tropezones de tu preferencia. Por lo general, su acompañante por excelencia son los dados de pan tostado.
Otro plato, que puedes preparar en menos de lo que canta un gallo, son las patatas a lo pobre. Consiste en un plato hecho a base de patatas peladas y cortadas en rodajas, las cuales se cocinan en una cazuela previamente untada con un poco de aceite de oliva.
A estas patatas se les unen unos cuantos ajos cortados en forma de lámina, cebolla y pimientos, ambos ingredientes cortados en trozos grandes. Luego, debes agregarles sal y pimienta y remover muy bien.
Tapa la cazuela y deja que todo se cocine a fuego lento. Eso sí, debes tener mucho cuidado al remover para que las patatas no se rompan. La idea es que estas queden lo más enteras posible.
Cuando haya pasado unos 30 minutos, desde el momento en que pusiste las patatas a cocinarse al vapor, escurre el aceite de oliva sobrante y ya estará listo para servir. De igual manera, puedes servirlo acompañado de una guarnición. El pan tostado vuelve a ser la mejor de las opciones, aunque este detalle queda a tu elección personal.
Finalmente, como postre o plato dulce, tengo que recomendarte los polvorones de Estepa. Estos polvorones suelen ser muy populares en toda España durante la ápoca decembrina. No obstante, son típicos de Andalucía.
Son elaborados con azúcar, canela, harina y manteca. Todos estos ingredientes deben mezclarse hasta formar una masa que luego debe ser llevada al horno. Se les conoce con el nombre de polvorones ya que, cuando te los llevas a la boca, se deshacen tal como si fueran polvo.
