Uno de los vegetales más nutritivos, que podemos preparar de diversas maneras, es la coliflor o brócoli blanco. Tanto el brócoli verde como la coliflor, son parientes cercanos. Este vege tal básicamente es una flor grande que contiene una amplia gama de minerales y nutrientes como vitamina A que ayuda a tener una piel saludable y una vista en buen estado, vitamina K que ayuda regenerar la piel, potasio, fósforo, y diversas vitaminas B como vitamina B 1, B2, B9 y B12.

Por si fuera poco, este vegetal tiene muchos antioxidantes que cuidan nuestra piel, previenen problemas cardiacos y ayudan a disminuir el riesgo de padecer cáncer y destruir los radicales libres ayudando a evitar el envejecimiento prematuro.

Debido a que contiene ácidos grasos como lo es el omega 3 y la vitamina K, este vegetal ayuda considerablemente a aliviar inflamaciones crónicas como las provocadas por reumas y artritis, incluso es bueno contra el dolor intestinal.

Es de muy fácil digestión, pues es diurética y ayuda depurar el cuerpo gracias a su alto contenido de potasio, agua y su bajo nivel de sodio (sal).

Dejando las propiedades a un lado, hay que saber cómo cocer coliflor, pues este vegetal tiene el pequeño defecto de que a veces no se hace bien por dentro al hervirse, se deshace o simplemente huele demasiado.

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