Comer es una de las necesidades primarias de todo ser vivo. Sin embargo, en el caso de los seres humanos, no lo hacemos solo para satisfacer esa necesidad o para seguir viviendo, sino también porque disfrutamos de ello.

Por eso, constantemente estamos buscando la manera de idear nuevas recetas, de usar otros ingredientes y de variar sus presentaciones. Teniendo en cuenta que, al comer, entra en juego una gran cantidad de estímulos, tanto olfativos, como visuales y gustativos.

Algunos han dicho que comer es un placer de los dioses y la verdad es que hay una gran variedad de sabores que aún nos faltan por experimentar. No conforme con ello, están las combinaciones posibles, que son una infinidad. Por eso, ¿por qué conformarnos y comer lo mismo todos los días? Hacerlo, sería como si solo comiéramos para preservar la vida y no para disfrutar de ella.

¿Te gusta la comida española? Esta se distingue por sus sabores potentes y deliciosos. Muchos de sus platos típicos están relacionados con la comida del mar, ya que su origen oscila entre lo rural y lo costero. Es una diversidad producto de muchas culturas, paisajes y hasta climas. Pero, en medio de tanta variedad, ¿alguna vez has probado la famosa fabada? Mejor todavía, ¿te gustaría aprender a prepararla para comerla cuantas veces lo desees?

La verdad es que cocinar no resulta ser una tarea muy complicada, cuando tienes a mano los ingredientes, las recetas y el procedimiento correcto para ejecutarlas. Y hoy es tu día de suerte, porque estaremos compartiendo contigo esta suculenta receta para que la disfrutes en compañía de tus seres queridos.

Por otra parte, ten en cuenta que puedes variarla eliminando o añadiendo los ingredientes que prefieras. De ese modo le darás un toque único y personal que nadie podrá copiar.

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