Cómo y cuándo sembrar Acelgas
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Existen plantas que aportan diferentes nutrientes a la dieta cotidiana de cada persona, por esta razón no deberían faltar en algunos jardín. La acelga es un vegetal con distintas propiedades y nutrientes beneficiosos para la salud. Este es motivo suficiente para aprender cómo y cuándo debe ser sembrado.
En realidad la acelga es un vegetal que tiene una historia proveniente del mediterráneo. Su antigüedad data incluso desde antes de cristo, en donde sus hojas eran aprovechadas tanto para las comidas o de forma medicinal. Su legado también forma parte de las razones por las cuales puedes aprender sobre su cultivo.
Desde ensaladas hasta los platos más finos utilizan la acelga como uno de sus ingredientes, para darle un sabor indiscutible. Esto acompañado con sus vitaminas (como la C) y minerales (como el calcio, potasio y sodio) la hacen favorita en muchas preparaciones. Además, bien refrigerada puede mantenerse fresca por mucho tiempo, conservando cada una de sus propiedades.
¿Que necesitas para y cuándo sembrar Acelgas?
- Semillas o plantas de Acelga
- Tierra con abundantes nutrientes
- Espacio
- Sol y agua
- Herramientas para el trabajo de la tierra: Pala pequeña y removedor.
Instrucciones para y cuándo sembrar Acelgas
- Plantación. Una de las ventajas principales que tiene la acelga es que un planta que se adapta muy bien a diferentes temperaturas, con excepción de las bajo cero. Por esta razón puede ser plantada en diferentes momentos del año, siendo el verano y otoño los más ideales.
- La idea es conseguir una temperatura constante, la misma puede ir entre los 6 grados centígrados y los 33 grados. Lo que corresponde evitar es que esta cambie constantemente, debido a que la planta debe acostumbrarse a un ambiente templado. Si existen muchas variaciones en el clima que la rodea puede haber el riesgo de que no se desarrolle adecuadamente.
- Otra parte que debes considerar a la hora de sembrar es que puede hacerse tanto desde la semilla (remojándola previamente por dos o tres días) como desde una anterior germinación (almácigo) pequeña. Lo más común es que se utilice el primer método, llevando un control de los espacios que se dejan entre cada planta.
- Mucho espacio en la tierra. La acelga puede sembrarse tanto de forma directa en la tierra, además de como macetas o plantones. Lo primordial a la hora de hacerlo es el espacio de profundidad que tenga para establecer sus raíces, ya que crecen en gran medida.
- Para su buen desarrollo hay que procurar dejar espacios entre cada planta de entre 15 y 30 centímetros de longitud, dependiendo del lugar. Igualmente es de vital importancia que no se pongan cerca de otros vegetales, debido a que tienden a afectar su crecimiento en búsqueda de una mayor área de cobertura.
- El suelo para sembrar acelga debe aportarle distintos nutrientes ya que esta planta sabe aprovecharlos para su buen progreso. El pH de la tierra debe estar cerca al 6,5 para mantenerse con vitalidad y cada semilla puede germinar en varias plantas, de las cuales se aprovechara la que este en mejor estado.
- El sol es importante. Para la acelga lo mejor es la luz del sol. Hay que saber aprovechar esta facultad ya que de esta forma se desarrollan con mejor salud. Igualmente su crecimiento se ve altamente favorecido gracias a los rayos que este astro emite.
- Este vegetal también puede desarrollarse en zonas sombreadas, mientras no haya una gran cantidad de frio. Pero en definitiva lo que mayormente les conviene es el abundante sol.
- No olvides el agua. La mejor forma para que esta planta pueda absorber en gran medida los nutrientes de la tierra es a través de agua. El drenaje de la misma es fundamental ya que, como se mencionó anteriormente, sus raíces crecen en longitudes de hasta 90 centímetros. Por esta razón lo mejor es conseguir que el líquido se esparza completamente por las mismas.
- La tierra debe de estar húmeda constantemente, pero sin que se sature. Para esto se debe rastrillar la tierra en diferentes ocasiones para que el agua pueda fluir por entre la misma. El riego debe hacerse una vez al día, midiendo la cantidad de agua para no rebosar la planta.
- Igualmente hay que tomar en cuenta el clima que rodee a la acelga, ya que puede variar la cantidad de agua dependiendo del calor que haya en la ambiente. Si la temperatura no es muy alta con dos o tres veces a la semana será suficiente para motivar su vida y desarrollo.
- Es muy resistente. Como quinto paso, a la hora de aprender cómo y cuándo sembrar acelgas, es el tomar en cuenta su resistencia. La misma no necesita de grandes o detallados cuidados ya que puede sobrevivir a elementos como plagas o enfermedades.
- Ten presente. A pesar de su resistencia hay que tener presente que igual no puede ser descuidada. Lo primero es eliminar las malas hierbas, que vayan saliendo alrededor de la planta, prolongadamente. Este cuidado se ve reducido a medida que la acelga se fortalece al crecer.
- Igualmente hay que tener cuidado con la aparición de babosas o caracoles ya que estos animales pueden destruir por completo el cultivo en muy poco tiempo. Para prevenir estas plagas se pueden colocar diferentes trampas, al igual que repelentes. También hay otros insectos como los pulgones, moscas, o arañas rojas que pueden representar una pesadilla sino son detectados y eliminados a tiempo.
- Para fortaleces su cuidado también se puede considerar el uso de abono con abundante nitrógeno. Este producto ayudara a evitar enfermedades como la mancha Foliar, una de las más comunes en este tipo de vegetales a pesar de su resistencia.
- Tallo y hojas. Finalmente el último paso para sembrar acelga satisfactoriamente es su cultivo. Su recolección comenzara pasados 60 días desde su plantación y dependerá del tamaño de la planta. Luego de esto se pueden ir recolectando en periodos de quince días, aproximadamente.
- Hay que recordar que esta planta no tiene frutos precisos, por lo que se utiliza sus hojas y tallos para el consumo. La idea es observar cuando las hojas tienen un tamaño de unos 18 o 20 centímetros y a partir de allí recolectarlas. Para ello hay que arrancar las hojas que están en la parte más externa de la planta, cuidando de no tocar las más cercanas al centro ya que a partir de allí es que continúan con su crecimiento.
- Finalmente, después de su recolección, pueden lavarse y guardarse, procurando eliminar el exceso de humedad. Su duración será muy variada, dependiendo de la refrigeración, pero pueden alcanzar hasta los diez días.
Consejos para y cuándo sembrar Acelgas
Ten presente como un último consejo que la acelga se lleva bien con plantas como los ajos, lechuga, perejil o repollo, por lo que puedes complementar tu siembra con estas plantas. Igualmente para las altas temperaturas es bueno colocarlas con maíz o girasoles que les proporcionen sombras protegiéndolas naturalmente del calor.
La acelga es una planta realmente noble que puede ser un excelente inicio para quienes están interesados en los cultivos. Sembrar esta planta trae muchos beneficios y uno de los principales es contar con un ingrediente de calidad para las diferentes comidas cotidianas.