Cómo pintar mandalas

Pintar mandalas es una técnica de relajación muy interesante y entretenida. Son representaciones del macrocosmos y el microcosmos. Se emplean en religiones y culturas orientales como el budismo y el hinduismo. El origen de la palabra proviene del sánscrito clásico que representa el centro del universo y el espacio que lo rodea.

Pintar mandalas. ¿Por qué?

Desde hace ya unos años, pintar mandalas se puso de moda como método de relajación. Combate la ansiedad y el estrés por medio de la pintura libre y llena de colores. O simplemente, supera el aburrimiento.

Son imágenes que están formadas por colores vivos y aleatorios, que responden solo al azar. El dibujo final, representará el estado anímico de la persona que lo ha pintado. No existe ni una técnica ni unas instrucciones. Se hace por el placer del azar. Para sentir la relajación y evitar el estrés del mundo ruidoso.

Recuerda, no requiere ninguna disciplina, y aunque hay quien los pinta según sus gustos estéticos, lo mejor es hacerlo con la mente abierta. Fortalece la creatividad e incluso si lo haces en compañía puede llegar a fortalecer vínculos familiares y afectivos.

Primeros pasos para pintar mandalas

Es imprescindible que te sientas relajado o relajada. Busca un lugar tranquilo, relajado y por su puesto bien iluminado. Puedes poner una música tranquila, lenta o instrumental.

El pintado de mandalas activa la coordinación entre los sentidos, sobre todo la vista y el tacto. Mantiene activa la mente y no es una actividad que requiera demasiado esfuerzo. Necesitas ganas, y colores.

Tienes que tener en cuenta que puedes encontrar libros de mandalas en cualquier librería. También puedes descargarlas de internet. Encontrar modelos de mandala  no es nada complicado. Tienes que escoger con qué material quieres pintar tu mandala. Pueden ser acuarelas, lápices, rotuladores, acuarelas o acrílicos. Hazlo como te apetezca y como te sientas mejor.

Respira de forma profunda y controlada mientras estés pintando para ayudar a tu cuerpo a relajarte.

Recuerda, es una actividad válida para todos, hazlo en solitario o con compañía.  Es muy sencillo y divertido. Hazlo en silencio y sintoniza con la forma y los colores.

Instrucciones para pintar mandalas

Una vez tengas todo preparado, nos vamos a disponer a pintar el mandala.

  1. Realmente no hay técnica específica pero se puede hacer de dos formas ordenadas. Puedes hacerlo desde dentro hacia fuera, o al revés, de fuera a dentro. Cualquiera de las dos formas tiene un significado concreto. Si lo haces de dentro a fuera, estarás buscando la forma de exteriorizar tus emociones y sentimientos, si por el contrario, pintas de fuera a dentro, estarás buscando un punto en el que interiorizar tus sentimientos.
  2. Tienes que dejar que se la intuición quien lleve el peso de la labor. Pinta por medio del pensamiento azaroso. No pienses en cómo quedará mejor o peor, hazlo bajo el espíritu de la arbitrariedad.
  3. Si dejas la mente en blanco, el mandala te dirá cómo te sientes. Si actúas de forma arbitraria, los colores que tu mente escoja te hablarán de cómo te sientes. Es el estado de ánimo el que escoge la gama en la que pintas. A medida que evoluciona el mandala, tu estado de ánimo irá cambiando también, y notarás la evolución en los colores.
  4. No busques la perfección. Tienes que disfrutar del trabajo. Libera la mente y concéntrate en lo que haces. Poco a poco verás como la perfección llega con la liberación. Trabaja según cómo te sientas, respirando a un ritmo tranquilo y sosegado.
  5. Cuando termines tu actividad, observa el resultado. Al acabar, tómate un respiro de unos minutos observar el resultado de tu esfuerzo. Este proceso de observación le da sentido a todo el proceso que has llevado a cabo antes. El mandala funciona como canal para encontrarte, y observar ese portal crea el encuentro perfecto entre el ser y la nada. Solo tienes que estar dispuesto o dispuesta a colorear según lo sientas, según te apetezca y obviamente, echarle muchas ganas. Como a todo.

¿Que necesitas para pintar mandalas?

  • Plantillas de mandalas. (Búscalas en un libro de mandalas o en internet)
  • Material para colerear: pinturas, lápices de colores, acuarela, acrílico… Lo que prefieras.
  • Velas, música, incienso… Cualquier cosa que te ayude a relajarte.
  • Paciencia.
  • Liberación mental.

Consejos para pintar mandalas

Mi consejo es que te tomes la pintura de mandalas como un acto de ocio relajante. No tengas prisa, ni estrés. Es para olvidarte de la ansiedad y para encontrarse con uno mismo.

Si te apetece puedes también pintar mandalas sobre superficies más complejas. Se hace sobre piedras, por ejemplo. Además, son un buen elemento decorativo. Los hay más llamativos que otros y si sigues los instintos pueden formar parte activa de la decoración de tu hogar.

Es una forma de pintar muy interesante, activa y relajante. Apoya a los demás a hacerla y hazla al menos una vez a la semana, notarás como tu mente se relaja y se desestresa.

Hay quien recurre a otras formas de dibujo para desestresarse. Por ejemplo hacer graffitis, tejer, o viajar. Pintar mandalas no implica que tengas que dejar nada de eso, y te ayudará sin duda a hacer tu vida más tranquila.

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