Cómo subir el Aconcagua

A la hora de afrontar deportes de riesgo en la naturaleza conviene saber diferentes aspectos acerca del montañismo, que van mucho más allá de saber elegir unos bastones u ordenar el material de montaña correctamente, sobre todo si estamos hablando de coronar grandes cimas. En este caso nos centraremos en explicarte todo lo que necesitas para subir el Aconcagua, la cima más alta de América.

El Aconcagua es la montaña más alta de América, del Hemisferio Sur y del Hemisferio Occidental, y son muchas las personas que sueñan con llegar a su cima, lo que no resulta nada sencillo. A lo largo de las próximas líneas te hablamos de todo lo que necesitas saber para prepararte para este reto.

Experiencia en la montaña

Si quieres saber cómo subir el Aconcagua, se antoja imprescindible que previamente adquieras experiencia en la montaña, debiendo para ello ir subiendo montañas de diferente altitud, sobre todo superando los 4.000 metros de altura antes de poder afrontar este reto que está lleno de desafíos.

En este caso nos encontramos ante un monte alto que conlleva una aclimatación a la altura, y aunque el ascenso no es complejo en lo que respecta al aspecto técnico, por el terreno, siempre es importante tener suficiente experiencia en la montaña antes de afrontar este reto.

Esta experiencia se puede adquirir en cuestión de unos meses de preparación o incluso en unos años. Lo más recomendable para prepararse bien es salir a las sierras y montañas tantas veces como se pueda y con personas experimentadas y especializadas para poder adquirir los conocimientos necesarios para poder enfrentarse a un reto de estas características.

Entrenamiento físico y técnico

Una de las claves para saber cómo subir el Aconcagua o poder llevar a cabo cualquier otra subida de esta magnitud radica en el entrenamiento físico y técnico. Cada persona que quiera subir esta gran montaña necesita seguir un nivel de entrenamiento físico y mental apropiado para centrarse en la potencia, el ejercicio aeróbico y entrenamiento concreto en ejercicios. También resulta fundamental llevar a cabo un entrenamiento realizado en el terreno, como las salidas a la montaña.

En principio se debe comenzar con una baja exigencia, para ir creciendo hasta conseguir alcanzar un punto más elevado y estar ya listo para poder afrontar esta subida. Durante el entrenamiento se necesita trabajar la resistencia cardiovascular que te lleve al límite con la capacidad pulmonar, pulsaciones altas en periodos prolongados, y ejercicios que puedan trabajar algunos sectores del cuerpo. Estos deben estar enfocados a trabajar la potencia y la resistencia muscular. Por otro lado, entrenar cargando mochila de expedición siempre es recomendable, y por supuesto, también realizar un entrenamiento técnico y salidas a la montaña con el objetivo de ir poco a poco consiguiendo una práctica efectiva.

Entrenamiento mental

Más allá de la mejora de las condiciones físicas, si quieres saber cómo subir el Aconcagua, se antoja imprescindible llevar a cabo un adecuado entrenamiento mental. A la hora de desempeñar actividades en la montaña, sobre todo cuando se trata de expediciones largas, no es sencillo mantener un buen estado mental, experimentándose sentimientos de soledad o de poca conexión con el grupo, además de echar de menos a familiares y otros seres queridos.

Por este motivo, es muy importante trabajar la cabeza, no solo por estos sentimientos, sino para tener la suficiente fortaleza para hacer frente al frío, el viento o la propia altura, así como a los diferentes obstáculos y condiciones que pueden llegar a darse en sus aventuras. Asimismo, es fundamental que se esté convencido de alcanzar el objetivo para poder llegar a la cima y no abandonar en el intento.

Indumentaria y equipo

Un punto que es importante y que hay que tener en cuenta para poder subir el Aconcagua o cualquier otra gran cima, es la de hacer una buena selección y cuidado de la indumentaria y el equipo a elegir. La indumentaria que se usa para la montaña tiene que estar adecuada, utilizando un calzado que irá adaptándose a las diferentes etapas del reto, necesitando calzado de trekking, de descanso y de alta montaña, mientras que en la ropa e indumentaria, hay que apostar por un sistema de capas.

La mochila a utilizar no debe tener más de 60 litros y cada persona debe ser lo más autónoma posible a pesar de que se cuenta con mulas y humanos que transportan equipo para facilitar la subida. En la expedición no pueden faltar: bolsa de dormir en alta montaña, colchoneta, casco, grampones, lentes categoría 4, linterna frontal, bastones, antiparras, etcétera.

Hidratación y alimentación

Para finalizar, si quieres saber cómo subir el Aconcagua, debes prestar mucha atención a la alimentación e hidratación. En altura es fundamental beber una buena cantidad de líquido, por lo que la hidratación se antoja imprescindible, pudiendo ser tanto agua como té, bebidas isotónicas, etcétera.

En lo que respecta a la alimentación, se pueden llevar productos frescos como frutas, verduras e incluso carnes. Es necesario ingerir cada dos horas algún producto energético y hacerse cuatro comidas diarias. En cualquier caso, no se debe escatimar en alimentos, ya que de ello depende la seguridad y la salud.

Siguiendo estas indicaciones y con un adecuado entrenamiento, podrás conseguir tu objetivo de subir el Aconcagua, aunque no será un proceso sencillo ni apto para todo el mundo.