Cómo hacer suavizante para la ropa
El suavizante es un producto muy común en nuestros hogares, ya que sirve para dejar la ropa más suave y menos apelmazada que si no usáramos suavizante.
Cuando lavamos una prenda de ropa, esta queda completamente limpia, sin embargo, el detergente hace que la ropa quede con un olor extraño y que quede como muy áspera y apelmazada.
Gracias al suavizante vamos a lograr dos cosas, en primer lugar, la ropa queda más limpia y suave, haciendo hasta que sea ineccesario planchar la ropa por lo suave que queda. En segundo lugar, vamos a dejar un aroma muy agradable en la ropa, el cual nos servirá para oler mejor.
Lo malo del suavizante es que tiene ciertas desventajas que nos echan atrás a la hora de usarlo. En primer lugar, el suavizante comercial que venden suele tener productos químicos que podrían dañar tus prendas de vestir en el largo plazo. También ocurre que estos productos químicos contaminan mucho el agua de la lavadora, dañando la salud de los animales acuáticos cuando este agua pasa al río por culpa de la espuma que se forma.
También ocurre que este suavizante es caro, haciendo que el precio de gastos de lavandería mensuales suba, ya que es 10 veces más caro que un detergente común.
Pero… Tengo buenas noticias para ti, ya que existe una opción de poder fabricar tu propio suavizante, con materiales muy baratos, que deja buen olor, que no daña la ropa, que deja la ropa lisa y que no contamina, algo que parece imposible, pero no lo es.
Desde hogar doncomos como siempre hacemos posible lo imposible y por lo tanto, te vamos a ayudar a fabricar un suavizante completamente casero, utilizando productos que seguramente tengas por casa y que no uses. Así que presta mucha atención si quieres tener tu ropa suave y limpia.
¿Que necesitas para hacer suavizante para la ropa?
- Vinagre blanco.
- Bicarbonato de sodio.
- Agua.
- Aceite de lavanda.
Instrucciones para hacer suavizante para la ropa
- Mezclar agua y vinagre:
Este suavizante que vamos a fabricar es muy sencillo de hacer, muy simple y muy efectivo al mismo tiempo. Como ya habrás visto en el apartado necesitas, los ingredientes que vamos a utilizar a la hora de hacer el suavizante los puedes encontrar por casa fácilmente o sino en cualquier supermercado. Vamos a comenzar con la base del suavizante, la cual va a ser con medio litro de agua y 250 mililitros de vinagre blanco, es decir, que va a ser el doble de agua que vinagre. Debemos mezclar estas dos partes bien y removerlas durante un tiempo, hasta que nos quede una mezcla totalmente homogénea del mismo, es decir, que tenga el mismo color y consistencia por toda la superficie del proto suavizante.
- Añadir bicarbonato:
Ahora le vamos a añadir un poco de bicarbonato de sodio al suavizante. El bicarbonato es un producto muy usado en los productos de limpieza, ya que debido a su alta alcalinidad, es uno de los productos que son capaces de eliminar más suciedad y de dejar la ropa sin apalmazar, equilibrando además el PH de la misma y haciendo que tenga un PH neutro,haciendo que esté libre de daños de ácidos de la comida al lavar.Hay que echar poco bicarbonato en nuestra mezcla, bastando con una cucharada o dos. Además hay que echarlo de forma lenta y controlada, con el objetivo de que el bicarbonato suba muy lentamente, evitando que nos deje la cocina perdida ya que si lo echas muy rápido, se va a desbordar por su efecto efervescente.
- Añadir la lavanda:
La lavanda es una planta conocida por su fuerte y agradable olor. Para este suavizante he querido añadir un poco de aceite de lavanda, con el objetivo de que deje un olor más agradable a la ropa, ya que si se echa solo con el agua, el bicarbonato y el vinagre, iba a quedar una mezcla con un olor un poco raro. Para ello vamos a utilizar aceite de lavanda, el cual se puede conseguir en cualquier sitio de cosmética y belleza. Vamos a echar un poquitin de esta esencia en nuestra mezcla, la cual vamos a remover bien para que de nuevo nos quede completamente homogénea. Para terminar, vamos a tapar el envase que estemos utilizando para lavar, para que el olor se quede ahí atrapado y no se marche.
- Usarlo:
Una vez hayamos hecho el paso anterior, ya tendremos nuestro suavizante listo para disfrutar del mismo con toda tranquilidad. La manera de usarlo no difiere en nada con la forma de usar un suavizante normal y corriente, es decir, que con ponerlo en la lavadora en el cajón del suavizante bastará para conseguir los mismos resultados que consigues con uno comercial. Como dato final , hemos conseguido 750 mililitros de suavizante a un precio ridículo, que te dará para unos 20 lavados echando una cantidad razonable. De otra manera, el precio hubiera sido 20 veces mayor, logrando más o menos el mismo resultado y además contaminando.