Virus de la Leucemia Felina
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Aunque no lo creas entre los gatos existe un virus relativamente común y potencialmente mortal, hablamos de la leucemia felina. El virus de leucemia felina o VLF abreviado, es una enfermedad potencialmente mortal, pero que si se previene y se cuida a tiempo, podremos mejorar la calidad de vida de nuestro gato y así alargar su vida misma.
Este virus es fácilmente contagioso. Secreciones como la saliva o las mucosas, son suficientes para causar que un felino contraiga esta enfermedad. Pese a que actualmente existen vacunas, muchos animales mueren a causa de este virus ya sea porque no tuvieron el ambiente sanitario adecuado o porque la enfermedad no fue detectada ni tratada a tiempo.
Debemos recordar que este es un tipo de cáncer. Los gatos son propensos a padecer diferentes tipos de cáncer, y éste es uno de los más peligrosos y fáciles de contraer. Sobre todo los felinos más expuestos son aquellos que nacen en ambientes de suciedad, y generalmente cachorros, ya que los felinos pequeños son los más vulnerables.
Para que identifiques algunos síntomas que pueden ayudarte a tener una idea parcial de si tu gato está infectado y tiene virus de la leucemia felina, te recomendamos leer este artículo y aplicar los consejos que describiremos a continuación.
Que Necesitas
- Gato
- Veterinario
- Observación
Instrucciones
- Esta enfermedad es potencialmente contagiosa debido a que es causada por un retrovirus que funciona manera de ARN, es decir invade directamente las células de ella, crea una copia de la información de la célula y finalmente, actúa infectando su material genético como ADN.
- Debido a esto, el virus puede pasar fácilmente al cuerpo del animal sin que éste presente una resistencia considerable, ya que el cuerpo básicamente lo considera parte de sí. Esto es lo que convierte a este virus en una enfermedad altamente riesgosa y fácil de adquirir.
- Los registros oficiales, señalan que este virus fue aislado por primera vez durante los años 60. En los gatos saludables se calcula que entre un 1% y un 5% de los felinos domésticos están infectados, mientras que en el caso de los felinos con salud inestable o enfermos, este virus afecta entre un 16% y 18%.
- El estimado varía del país y de la situación salubre que se tenga en diferentes regiones. Los hogares donde hay un nivel adecuado de higiene constante, son menos propensos a ser riesgosos para que los gatos adquieran este virus, aunque esto no asegura que no exista la posibilidad de que enfermen después.
- En los hogares donde el nivel de higiene es mínimo o es una zona insalubre, el riesgo de contagio es potencialmente mayor, esto sobre todo afecta a gatos pequeños quienes portan la enfermedad incluso durante bastante tiempo antes de morir, y son un peligro ya que pueden contagiar a otros felinos.
- Es más común que este virus lo contraigan los gatos callejeros debido a que están constantemente en contacto con ambientes insalubres y con otros gatos que podrían estar infectados. Mientras que en el caso de los gatos domésticos, aunque este riesgo existe, la posibilidad de contagio es inferior.
- Este virus se transmite a través de la saliva y otras secreciones y excreciones que pueda tener el gato. La saliva, la orina, las heces, la sangre, o incluso la leche materna de las gatas lactantes pueden ser mecanismos potenciales de infección.
- Las peleas, mordidas, juguetes, o compartir envases donde se alimenten o beban agua, pueden ser herramientas que faciliten la transmisión de este virus. Sin embargo muchos gatos están en contacto con el virus y no enferman, pero eso no quiere decir que no sean portadores sigilosos de la enfermedad.
- Si tu gato ha tenido contacto con gatos callejeros no te alarmes demasiado, se calcula que un tercio de los gatos domésticos desarrollan inmunidad con esta enfermedad, sobre todo entre gatos anos adultos. Claro, esto no quiere decir que no sean portadores, por lo cual debemos vacunarlos, pero si quiere decir que es menos probable que se infecten.
Consejos
- Pese a que no se asegura una eficacia de protección total contra el virus, sí se puede disminuir radicalmente la posibilidad de contraerlo si se vacuna al felino contra esta enfermedad. Lo ideal es vacunar a nuestro gato cuando es joven, ya que durante la infancia del gato, es cuando más expuesto está a morir por esta enfermedad.
- Evitar que nuestros gatos tengan contacto con gatos callejeros, también es una manera adecuada de prevenir que nuestro gato adquiera este hubo otros virus que afecten su salud. También es recomendable llevar a nuestro gato por lo menos una vez cada seis meses a una revisión con el veterinario y si es conveniente, realizar una prueba de sangre para ver si el gato tiene leucemia.
- Si tu gato es un cachorro, te recomendamos realizar un examen de sangre entre las 6 y 12 semanas de haber nacido para saber si existe el riesgo de que tenga leucemia u otra enfermedad retroviral.