Cómo mejorar el aspecto de las cicatrices

La piel es la membrana que recubre todo el cuerpo y encierra todos los órganos, músculos, venas, tendones y órganos que lo conforman. Es una gran barrera de protección que detiene todo tipo de infecciones y contacto con agentes que pueden causarnos graves enfermedades e incluso la muerte.

La piel es el primer frente de batalla con los patógenos que ofrece nuestro cuerpo, y por ello se ve sometida a todo tipo de agresiones que tienen mayor o menor impacto sobre ella. La piel se puede ver expuesta a laceraciones, cortes, quemaduras, inclemencias del tiempo, trabajo duro, todo tipo de temperaturas, golpes, etc.

Todos son traumas de diversa causa y naturaleza que la afectan, y cuando se curan, es decir, cuando la piel se cura a sí misma, se forma una cucatriz. Cuando la lesión es pequeña, la autoreparación de la piel no deja huella alguna y vuelve a tener el aspecto original,

Sin embargo, cuando la agresión recibida es mayor y más profunda, mayor es la cicatriz visible que quedará tras la curación de la herida. Sin embargo, cuando tenemos una herida, o hemos sido sometidos a una operación quirúrgica, o por cualquier otro motivo, tenemos una parte de la piel que tiene que cerrarse y cicatrizar, hemos de saber que sí podemos ayudar a que su aspecto final sea mucho más estético de lo que sería sin cuidados.

Podemos aplicar cuidados tanto mientras la cicatriz se está cerrando, como después, con el fin de que la piel tenga el mejor aspecto posible, aunque tampoco debemos olvidar que una cicatriz nunca se va a eliminar por completo. Te damos seguidamente una serie de consejos que pueden ayudarte a que sepas cómo mejorar el aspecto de las cicatrices.

No al sol

Las radiaciones solares son bastante perjudiciales para una cicatrización, por lo que hay que evitar en todo lo posible la exposición al sol. En caso de que haya que tener la zona bajo la luz diurna, deberás aplicar una crema solar con un factor de protección de nivel 50, unos quince a treinta minutos antes de la exposición al sol, aplicando una nueva capa cuando la piel comience a recibir el sol. También es recomendable mantener tapada la zona de piel en fase de cicatrización.

Hidratación

Hay cicatrices de cierta gravedad en las que la humedad normal que deben tener se evapora con mucha facilidad, por lo que necesitan ser hidratadas continuamente, mediante pomadas y cremas, junto con vendajes oclusivos que retengan la humedad. También se suelen prescribir aceites, vaselina, cera y otros productos similares.

Masajes: mucha precaución

Si es preciso aplicar algún masaje en la zona cicatrizal, deben darse con extremo cuidado, teniendo en cuenta la inflamación que tenga, y están prohibidos en caso de que haya infección. Nunca deberá producir ninguna sensación dolorosa.

Vendajes especiales

Se pueden usar vendajes especiales para cicatrices con el fin de que estas evolucionen correctamente por medio de reducir al mínimos las tiranteces y presiones de la piel donde está la herida. Están los que son como suturas adhesivas estériles, que además son porosos y transpirables, lo que ayuda a acortar el tiempo de cierre de la cicatriz.

Geles para las rojeces

Son a base de silicona fluida y favorecen el reblandecimiento de las cicatrices y reducen el enrojecimiento que muchas veces colorea de forma permanente la cicatriz, con un efecto muy poco estético.

Corticosteroides

Si las cicatrices presentan algún tipo de abultamiento se pueden tratar con inyecciones o con pomadas a base de corcicosteroides, lo que ayudará a mejorar la apariencia, el picor o el dolor.

Tatuajes y maquillajes

Una forma sencilla y no médica de atajar los efectos antiestéticos de una cicatriz es el uso de tatuajes en donde son más visible, o con maquillaje corrector.

Cirugía

Siempre se puede volver a usar la cirugía, en este caso para extirpar la cicatriz y volver a cerrar la apertura de la piel con puntos mucho más finos y con técnicas que harán que la nueva cicatriz, porque seguirá habiendo una, será mucho más fina y menos aparente.

Subcisión

Este método se usa para las cicatrices que tienen aspecto de hundidas, al estar deprimidas en su centro o interior. Se corta esa parte solamente, lo que permite la formación de nuevo colágeno que dará un aspecto más liso a la cicatriz. Se usa mucho en las que produce el acné. Muchas veces se combina con la inyección de materiales de relleno como grasa de la propia persona o con biopolímeros, para conseguir el efecto deseado.

Siliconas

También se puede mejorar el aspecto de las cicatrices con el uso de láminas de silicona, que se aplican directamente sobre la zona. También existe el formato de crema, y con un uso constante la cicatriz adquiere una forma y un color mucho más natural.

La zetaplastia

Con esta técnica se busca que la cicatriz se alinee mejor con los pliegues de la piel. Se extirpa la cicatriz y se hacen más incisiones en cada lado de la herida, retirando porciones triangulares de piel, que se reposicionan en forma de Z o en ángulos distintos sobre la cicatriz original. Se logra que la cicatriz pueda tener un movimiento natural y una presencia menos deformada de la piel de la zona.

Injertos

Se retiran trozos de piel de una zona sana del cuerpo de la persona tratada y se colocan sobre la zona afectada y se trata también con corticosteroides para lograr que el injerto prenda definitivamente sin que se origine una nueva cicatriz.

Otros métodos

Hay otros métodos con los que cuenta la medicina para eliminar o disminuir las cicatrices, como los peelings, o “pelados” de la piel, sobre todo para cicatrices superficiales; la dermoabrasión y la microabrasión, la crioterapia a base de frío localizado, o los tratamientos con láser.

Psicoterapia

En todas las fases de cicatrización de la piel, sea cuando se está cerrando o cuando ya está madurada completamente, es muy importante afrontar la manera en que la persona convive con la cicatriz, en sus relaciones sociales y laborales. La psicoterapia será de gran ayuda para que el impacto emocional sea menor.

Imágenes: Wikimwdia