¿Cómo diseñar un buen logo?
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Cuando nos encontramos en la labor de diseñar un buen logo, siempre nos surgirá la pregunta de ¿Cómo lo hago? Después de todo, hacer las cosas siempre es posible, pero hacerlas bien, ahí es donde recae el dilema. Esta situación por la que seguro han pasado infinidad de diseñadores o creativos, se verá respondida en este artículo. Ojo, evidentemente no pretendemos tener la solución mágica que servirá para todo el mundo, pero lo cierto es que si tomas en cuenta lo que aquí explicamos. Es muy probable que termines diseñando un buen logo.
La clave para lograrlo radica en el orden u organización. Después de todo si queremos que las cosas se hagan bien, siempre nos resultara fundamental tener algo de orden. Y para lograr el orden, debemos tener claro una serie de parámetros, los cuales en conjunto, nos permitirán obtener o lograr nuestro fin. Cuando se trata de diseñar un buen logo debemos de tomar en consideración la siguientes “leyes”:
- Un logo ha de ser simple.
- Debe ser legible.
- Ha de ser escalable.
- Tiene que ser reproducible.
- Ser también distinguible.
- Por supuesto, memorable.
Si a la hora de diseñar un logo tienes presente estas 6 leyes, os puedo garantizar que el resultado, irremediablemente, será bueno. Pero, ¿Qué significan cada una de estas leyes o principios? De eso hablaremos más adelante.
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Un buen logo ha de ser simple.
Cuando hablamos de simpleza, nos referimos a la frase de “Has más con menos”. Hay quienes creen que un logo de be ser si o si estrambótico, y con efectos, brillos por aquí y colores por allí, NO. Un buen logo es aquel que pese a su simpleza, logre aferrarse en la memoria de sus espectadores, permitiendo que este no lo olvide. Por ello es que el minimalismo es tan efectivo, porque las marcas que lo emplean, saben que con figuras simples, pueden llegar a impactar más.
Ser Legible.
Los logos cuando se encuentran en su proceso de creación, siempre deben ser bastante legibles. Que su forma, o iconografía, logre ser interpretada por los espectadores. Pudiendo encontrar en el algo que relacione directamente con la marca. Esto es aún más importante cuando nos encontramos en el proceso de creación de un logotipo, o bien un monograma. Si tu logo no es capaz de transmitir lo que debe, entonces estas fallando en su legibilidad, y por ende, queda un poco lejos de ser un buen logo.
Un buen logo escalable.
La escalabilidad hace referencia a la capacidad que posee un logo para adaptarse a los diferentes tamaños y formatos que sean requeridos por la marca. Sin que durante el proceso se pierdan elementos de su diseño o forma original.
Un buen logo debe ser legible aun si se reduce de tamaño, lo pegues en un gran cartel, o simplemente lo visualices en algun perfil social. En donde sea que tu logo sea estampado, el mismo debe ser capaz de mantener su diseño intacto, sin perder nada en el camino, eso es escalabilidad.
Reproducible.
Como seguro sabéis, los logos no son emblemas que se limitan a solo ser presentados en formatos digitales. Los logos de cualquier tipo, son usados por las marcas para estar presentes en todos los elementos y productos que la conforman. Cuando decimos que un logo es reproducible, es porque puede ser bordado, estampado, pintado, impreso, en fin. Independientemente de donde el dueño decida colocarlo, el logo debe ser capaz de mantener su forma.
El logo tiene que ser distinguible.
Esta es probablemente la ley más fácil de comprender, pues como su propio nombre señala. Uno de los rasgos o cualidades que debe poseer un buen logo, es la capacidad de distinguirse de la competencia. Puede parecer sencillo en principio, pero lo cierto es que lograr distinguir es más complejo de lo que parece. Hay marcas que se diferencian de su competencia con el uso de paletas de colores diferentes, otras con diseños un poco más sofisticados, tradicionales, o directamente recurrir a lo moderno con el minimalismo. En fin, es labor del diseñador encontrar la manera más apropiada de distinguir su logo del resto.
Memorable.
Por último, pero no por ello menos importante, un logo ha de ser memorable. Con esto nos referimos a que sin importar el pasar del tiempo, el logo sea capaz de mantenerse en la memoria de sus consumidores. Puede que hasta evocando sentimientos de apego. Esta es una cualidad que ha de estar presente en todo buen logo, pero desde ya os avisamos que no es nada fácil de lograr, y que solo se consolida con el tiempo.
De esta manera concluimos la redacción de esta entrada, esperamos que ahora tengáis una idea más clara de cómo hacer un buen logo. Si queréis leer más entradas similares, considera visitar: ¿Qué es un editor vectorial?
