Cómo se pilota un avión: conceptos básicos
Después de haberte explicado cómo pilotar una moto, cómo pilotar drones o cómo conducir un quad, es la hora de que conozcas una serie de conceptos básicos de cómo se pilota un avión, una información que te será de un gran interés en el caso de que tu sueño sea el de convertirte en piloto de avión, o simplemente si eres un apasionado de estas aeronaves.
A continuación te vamos a explicar todo lo que necesitas saber para entender el mundo del pilotaje, por lo que te recomendamos que estés muy atento a todo lo que te vamos a contar al respecto.
Cómo se controla el avión en el aire
Un avión se pilota y controla en el aire haciendo uso de las superficies de control, que se encuentran ubicadas en la cola y las alas y que gracias a su movimiento se consiguen realizar diferentes movimientos. Estos movimientos son los siguientes:
Alabeo
Se consigue haciendo mover los alerones de manera asimétrica, es decir, cunado el alerón de una de las alas baja, de manera simultánea sube la de la otra ala, de manera que haya una mayor sustentación en una ala que la otra, provocando la inclinación del avión hacia un lado.
Lo habitual es que en un vuelo comercial el límite de grados de alabeo se sitúe en torno a los 30 grados. No obstante, en crucero suele ser de solo 10 grados y en el ascenso inicial tras el despegue de unos 15 grados en el caso de que sea necesario.
Cabeceo
El cabeceo se consigue con el movimiento de los elevadores, que se encuentran situados en la cola. Su funcionamiento es similar al de los alerones, pero en este caso se trata de un movimiento simétrico. De esta manera, cuando los elevadores suben, la cola del avión baja, provocando de esta manera que el morro del avión suba.
En este caso, los límites se encuentran en 20 grados de morro arriba, aunque acostumbra a ser solo de 10-15 grados.
Guiñada
La guiñada se consigue con el movimiento del timón de dirección, que se encuentra localizado en la cola. De esta manera, cuando el timón se mueve hacia la derecha, la cola del avión lo hace hacia la izquierda, siendo un funcionamiento similar al que podemos encontrar en el timón de un barco.
Para llevar a cabo las diferentes maniobras de las superficies de control, se accionan por los pilotos a través de pedales y mandos.
Flaps
Para saber cómo se pilota un avión y sus conceptos básicos es importante conocer lo que son los flaps. Estas son unas superficies que se encuentran ubicadas en la parte posterior del ala, y que se extienden hacia fuera y abajo. Gracias a ellas se consigue incrementar la sustentación, aunque ello también supone que haya un aumento de la resistencia aerodinámica.
Las alas de los aviones se encuentran diseñadas para poder conseguir la mayor eficiencia en fase de crucero, ya que es la fase que tiene una duración mayor. Los flaps se encargan de modificar las formas de las alas de tal forma que el avión es capaz de volar a una velocidad inferior.
Estos no tienen solo dos posiciones, subidos o bajados, sino que tienen distintos grados de calaje. Antes del despegue se bajan un poco o incluso pueden llegar a estar, según el modelo, completamente retraídos; y una vez que se ha despegado se van subiendo de una manera progresiva a medida que la aeronave va ganando velocidad. En el proceso de aterrizaje nos encontramos con la situación inversa.
Su importancia es máxima, ya que aunque se podría aterrizar sin flaps, había que hacerlo a una velocidad mayor, lo que a su vez implicaría una mayor longitud de pista y un mayor uso de los frenos.
Spoilers
Una vez conocidos los conceptos básicos del funcionamiento del movimiento del avión en el pilotaje, así como la importancia de los flaps, es necesario conocer qué son los spoilers, otro de esos elementos de las aeronaves que es imprescindible para su correcto funcionamiento.
Los spoilers son unas superficies rectangulares que se levantan por encima del ala y que tienen una doble función, la de actuar como freno aerodinámico y reducir la sustentación.
En el momento del aterrizaje nos encontramos con que, a pesar de que las ruedas se encuentren en contacto con el asfalto, las alas siguen generando sustentación debido a la velocidad del avión, lo que hace que no todo el peso del mismo recaiga sobre el tren de aterrizaje.
Al elevar los spoilers se consigue reducir la sustentación, incrementando de esta manera la eficacia de los frenos de las ruedas. Al mismo tiempo que se realiza el vuelo también se pueden llegar a elevar los spoilers, aunque no tanto como sucede en el aterrizaje, con la finalidad de reducir la velocidad o descender de una manera más pronunciada sin que incremente la velocidad. Asimismo, también pueden llegar a elevarse de una forma asimétrica, es decir, los de uno de los alas. Esto sucede en algunos aviones y se emplea para determinados virajes, logrando así complementar el movimiento de los alerones.