Juegos de cartas fáciles con la baraja española
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La baraja española nos ofrece muchas posibilidades a la hora de poder pasar un gran rato de diversión en compañía de familiares y amigos, y tras explicarte cómo jugar a la brisca, a la escoba o al 7 y medio, ha llegado el momento de hablarte de otros juegos de cartas fáciles con la baraja española de los cuáles puedes disfrutar. Te traemos una selección de una serie de juegos sencillos que te permitirán disfrutar de grandes momentos de diversión.
El mentiroso
El mentiroso es considerado uno de los mejores juegos de cartas españoles para niños, ya que es sencillo y divertido. En él pueden jugar hasta un máximo de diez personas, y para poder jugar se necesitan todas las cartas de la baraja española, que son un total de 40.
El objetivo principal del juego es el de deshacerse de todas las cartas que te han tocado en el reparto, tratando para ello de engañar a los rivales. Como regla a tener en cuenta, las cartas de ases son comodines, representando el valor de cualquier carta.
El jugador que comienza la partida coloca boca entre una y tres cartas, y tendrá que indicar en voz alta una conjugación de cartas (que deben tener el mismo número),y será la jugada que dice haber lanzado. El siguiente jugador, que es el situado a su derecha, debe continuar depositando una o varias cartas coincidiendo con el número de la baraja, por ejemplo «otro caballo más», y así sucesivamente.
Si un jugador desconfía en su turno, puede levantar las cartas para comprobar su veracidad. Si la jugada del anterior es cierta, el desconfiado se llevará todas las cartas. Sin embargo, en el caso de que el anterior haya mentido, será él quién recoja todas las cartas del montón. Luego se volverán a echar cartas, aunque no podrán ser del mismo palo que antes, y deberá empezar el jugador que se llevó las cartas en la baza anterior. Gana el que se quede antes sin cartas.
El burro
Si buscas juegos de cartas fáciles con la baraja española para disfrutar en familia e incluso con niños, una opción sencilla y divertida es El burro. Este consiste en conseguir que todas las cartas de la mano (cuatro) sean del mismo palo o iguales, según las escogidas para hacer el mazo.
Es posible elegir hasta cuatro cartas del mismo palo o que sean de la misma figura o número, con independencia del palo, lo que implica que sea necesario llegar a un acuerdo a la hora de preparar el mazo. Según el número de jugadores de la partida (entre cuatro y diez), se determinarán las cartas que se ponen en juego
Para jugar se dan cuatro cartas a cada jugador y el objetivo es el de tratar de obtener cuatro figuras iguales. Para ello se hace un «draft», tomando una de las cartas y se le da boca abajo al jugador de derecha o izquierda, según se haya establecido. Cuando uno de los jugadores consiga las cuatro figuras, colocará la mano en el centro de la mesa y el resto tendrá que hacer lo propio. El último será el burro.
El cinquillo
Si hablamos de juegos de cartas fáciles con la baraja española no podemos dejar de nombrar a El Cinquillo, uno de los más divertidos y apto para todas las edades. El número de participantes se encuentra entre dos y seis, y comienza a jugar quién tenga el cinco de oros tras haber repartido las cartas. En este juego se reparten entre 10 y 15 cartas, debiendo pactarlo inicialmente en función del número de personas que sean parte del juego.
La finalidad del juego es hacer escaleras del mismo palo, ya sea de forma ascendente o descendente, partiendo de una carta del número 5 sobre la mesa. Ganará la partida el primer jugador que se quede sin cartas.
Tras repartir todas las cartas sobre la mesa, empezará el jugador que tenga el cinco de oros, que lo colocará. Luego continua el jugador de la derecha y así sucesivamente. Es posible colocar cincos o todas aquellas cartas que sigan en progresión ascendente o descendente que sean del mismo palo. De esta manera, si solo está colocado el cinco de oros en la mesa, los jugadores solo pueden colocar el seis o el cuatro de oros o un cinco de otro palo.
Si un jugador no puede colocar ninguna carta, puede pasar el turno y le corresponderá a otro jugador. No obstante, solo se puede pasar si no se tienen ninguna carta que colocar, y si tiene varias posibles, tendrá que elegir aquella que más le pueda convenir para poder alzarse como ganador del juego.
Variantes
Existen algunas variantes de este juego, como la que dice jugar con la Ley del Cinco, que hace que los jugadores se encuentran obligados a colocar en la mesa todos los naipes con el número cinco desde el principio, haciendo que todos palos se encuentren abiertos desde un principio.