Cómo adelgazar la papada

Estos trucos y ejercicios te van a ayudar a disimular y a adelgazar la papada:

1. Maquillaje. Empecemos con un truco para disimular la papada. Se trata de maquillarte para que tu papada quede desapercibida, para ello sigue los siguientes pasos.
   – Usa un maquillaje en los ojos llamativo. Cuando alguien se dirija a verte o hablarte, debe fijarse en tus ojos, de esta forma no se fijará en la papada.
   – Usa correctores o polvos un poco más oscuros que tu tono de piel y aplícalo de la siguiente forma: sigue la línea de la mandíbula desde la barbilla hasta la oreja y difumina muy bien el polvo aplicado o el corrector. Con el sobrante de polvo que queda en la brocha pásala por la garganta desde la barbilla hacia abajo (en este paso sólo usamos polvo nunca corrector).
   – Usa una base de maquillaje que sea idéntica a tu piel y difumínala muy bien en los bordes, sobre todo por la zona de la mandíbula. Si quedan cortes entre el maquillaje y la piel del cuello se resaltará más la papada.
   – Mantén los labios neutros, por lo que utilices barras de labios llamativas ni brillos.
2. Corte de pelo. Llevar un tipo de corte de pelo o peinado también te puede favorecer mucho. Prueba esto:
   – Lleva el pelo largo, como mínimo debe quedar 4 o 5 cm por debajo de la barbilla.
   – El corte de pelo inclinado, es decir, más largo delante que de atrás también es muy favorecedor.
   – Llevar el pelo en capas y con ondas disimulará muy bien la papada.
3. Alimentación. Si tu papada se debe al sobrepeso comienza a comer saludablemente.
   – Evita el azúcar, la bollería, las grasas, los fritos, los embutidos y los lácteos cremosos.
   – Aumenta el consumo de frutas y verduras, así como alimentos ricos en fibra y proteína, tanto animal como vegetal.
   – Tomar un vaso de agua media hora antes de cada comida ayudará a empezar a comer tranquilamente y sin tanta desesperación.
   – Come despacio saboreando cada bocado.
4. Ejercicio. Continuando con el punto anterior, si tu papada se debe al sobrepeso comienza una rutina de ejercicios, que además de hacerte adelgazar te aportará muchísimos más beneficios.
5. Exfoliación. También existe la posibilidad de que tu papada se encuentre flácida. En este caso hay que prestarle atención y cuidados extras. Lávate bien la cara y el cuello todos los días antes de ir a dormir. Además, al menos una vez a la semana deberás hacerte una exfoliación además de en la cara en el cuello, así removeremos las células muertas y beneficiaremos la regeneración celular. Por último recuerda hidratar muy bien la zona todos los días. Usa una crema que mejor vaya con tu tipo de piel y necesidades y aplícala en el rostro y en la zona del cuello eplícala con la mano extendida, el pulgar un poco abierto y haciendo presión desde la barbilla hacia el pecho.
6. Ejercicios de fortalecimiento. Puedes realizar unos cuantos ejercicios diarios para fortalecer y reducir la papada. Sólo te llevarán unos diez minutos al día.
   – Siéntate con la espalda recta, cierra la boca, y haz círculos en sentido de las agujas del reloj unas 10 veces y en 3 series.
   – Mantén la cabeza recta y gírala hacia la derecha, mantén la posición y luego vuelve al centro. Luego repite hacia la izquierda. Haz 3 series de 10 repeticiones cada una.
   – Con la cabeza recta lleva la cabeza hacia atrás lo máximo posible, quedando mirando hacia el techo. Aguanta en esta posición durante unos segundos mientras que aprietas los labios.