29 semanas de embarazo
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Durante la semana 29 de embarazo, el bebé sigue su desarrollo. Ya se empieza a encajar en el cuello del útero preparándose para el momento del parto. Durante este periodo el bebé ya pesa alrededor de 1300 gramos y mide unos 40 centímetro. En cuanto a la futura mamá puede comenzar a sentir contracciones que son las conocidas como contracciones de Braxton – Hicks o falsas contracciones la cuales son irregulares y menos dolorosas que las verdaderas contracciones de parto. Hoy en doncomos.com/salud vamos a enseñarte todo acerca de la semana 29 de embarazo, para que te sientas segura y conozca cómo va el desarrollo de tu bebé. Adelante!
Instrucciones
- Durante esta semana de embarazo, el bebé se mueve cada vez con más precisión, empieza a cambiar su postura para colocarse con la cabeza hacia abajo esperando el momento del parto. Por lo que empieza a encajar su cabeza en el cuello del útero con este fin.
- Como dijimos anteriormente, el bebé ya pesa 1,3 Kilogramos y mide alrededor de 40 centímetros, por lo que es lógico que la futura mamá comience a sentir dolores abdominales. En el interior de útero, el bebé e encuentra cómodo con los brazos doblados sobre su pecho y las rodillas hacia arriba, posición que va a mantener hasta que nazca.
- El sistema nervioso central continúa su desarrollo. Los órganos sensoriales del bebé también continúan desarrollándose, lo que hace posible que sus percepciones sensoriales sean cada vez más precisas. Grandes investigadores han encontrado en algunos estudios realizados que durante esta etapa de gestación, el cerebro del bebé desarrolla la capacidad de generar conocimiento, es decir su propia memoria.
- Hasta esta etapa, los glóbulos rojo de su sangre se formaban en el bazo, pero a partir de este momento, esta función ya será responsabilidad de la médula ósea, tal cual como sucede en la persona adulta. Aumenta el número de bronquiolos y alveolos en el aparato respiratorio. En el sistema reproductor del varón descienden los testículos hasta el escroto, y las niñas ya cuentan con cinco millones de ovocitos.
- Los huesos del bebé ya están bien desarrollados, pero permanecen blandos y flexibles. Su piel comienza a tomar un color rosa y a ponerse lisa debido a la grasa que se forma por debajo de ella.
- El pelo empieza a crecer, alargarse, y el vérmix continúa aumentando.
- Los ojos muestran el reflejo pupilar ya que son estimulados por la luz. El bebé ya abre y cierra los ojos, pero la vista es el único sentido que no puede experimentar hasta el momento del nacimiento, ya que en el útero hay mucha oscuridad, pero una luz muy fuerte puede llegar a reflejar algo para el niño.
- Durante este periodo empiezan a aparecer las contracciones de Braxton – Hicks, las que preparan al útero para el momento del parto. La diferencia que hay con las contracciones previas al parto es que estas se caracterizan por ser irregulares y mucho menos dolorosas. La futura mamá puede notarlas porque se siente dolor abdominal durante este tipo de contracciones.
- Estas contracciones que puede experimentar la futura mamá están asociadas a la postura del bebé en el útero. Es muy común que se produzcan cuando la mujer camina está en movimiento. Estas son normales durante el embarazo a partir de la semana 29 aproximadamente. Si llegaran a producirse estas contracciones muy intensas, frecuentes y con regularidad, es necesario que la futura mamá consulte urgentemente al médico porque puede tratarse de un parto anticipado.
- Puede pasar que la futura mamá note que aumenta de peso desmedidamente cada día que pasa pero en realidad esto se debe a que durante esta semana el bebé crece mucho y aumenta bastante de peso. Por este motivo puede que la futura mamá se sienta más torpe de movimientos, más cansada y con fatiga. Para sentirte mejor debes llevar una vida más tranquila disminuyendo el nivel de actividad diaria (trabajo, tareas domésticas, etc.), evitando hacer esfuerzos excesivos, haciendo pausas si estás sentada o parada.
- Es conveniente, a partir de esta semana de embarazo, disminuir el riesgo de estar con contacto con productos teratógenos que puedan causar algún daño a tu salud y por ende a la de tu bebé. Por eso es necesario que sigas una dieta balanceada y variada. No consumir nada de alcohol y menos fumar o consumir algún tipo de droga.
Que Necesitas
- Llevar una vida más tranquila disminuyendo el nivel de actividad diaria (trabajo, tareas domésticas, etc.), evitando hacer esfuerzos excesivos, haciendo pausas si estás sentada o parada.
- Respetar el descanso, sobre todo el de la noche, durmiendo al menos 8 horas al día. Puede que la necesidad de ir al baño o las molestias de posturas interrumpan tu descanso, por eso es necesario que evites beber líquidos antes de dormir y acortarse de costado con una almohada entre las piernas para aliviar la sobrecarga de la espalda.
- Hidratar tu piel al menos dos veces al día con cremas, para así evitar que salgan estrías por el estiramiento de la piel debido al aumento de peso y crecimiento del bebé.
- Come sanamente incorporando vitamina C a través de la naranja o cualquier cítrico, alimentos ricos en calcio, como la leche y sus derivados, el hierro a través de la carne y el pescado, etc.
- Debes tomar mucha agua para evitar hinchazón especialmente en pes y manos, y debes salir a caminar por lo menos media hora diaria, esto favorecerá a la circulación de tu sangre y evitará fuertes dolores de espalda.
Consejos
- No tomes ningún medicamento antes de consultarlo con tu médico obstetra.
- Evita estar en zonas de radiación, así como en zonas donde hayan productos químicos como ser insecticidas, o productos de jardinería.
- Es normal que tengas algunos sueños referidos a cosas que realmente te preocupan como ser el parto, nacimiento de tu hijo, el sexo de tu bebé, la vida que llevarás una vez que nazca. Por eso debes saber que estas sensaciones son normales, y que lo más importante es asegurar un placentero descanso.