Cómo hacer el mantenimiento de una bicicleta
Después de aprender a ir en bicicleta es importante que sepas que es imprescindible hacer un buen mantenimiento de la misma; lo cual es clave para que pueda funcionar perfectamente, como lo hacía en el primer día.
Aunque para reparar tu bicicleta es importante siempre acudir a un mecánico profesional, la realidad es que existen algunas recomendaciones de mantenimiento y reparación que te ayudarán, por ti mismo, a alargar la vida útil de tu bici.
De esta forma, conociendo unos aspectos básicos, te encontrarás en la situación de que podrás disfrutar más de ella, logrando un mayor rendimiento; y evitando que te pueda dejar tirada en cualquier momento y lugar.
Antes de empezar a explicarte cómo hacer el mantenimiento de una bicicleta es importante que sepas que para llevarlo a cabo no hace falta ser ningún experto. En nuestra guía básica te vamos a dar una serie de consejos básicos para que la mantengas en mejor estado.
La importancia de las herramientas para un buen mantenimiento
Lo primero que necesitas saber para poder hacer un buen mantenimiento de tu bicicleta es contar con un juego de herramientas adecuado. Es aconsejable siempre optar por la compra de herramientas de calidad, ya que si optas por una mala herramienta, es posible que llegue a estropear alguno de los tornillos o piezas de tu bici.
Poco a poco deberás reunir un buen kit de herramientas para tenerlo en tu hogar y así llevar a cabo el mantenimiento de la mejor manera posible; y además no debes olvidarte de contar con otro kit que puedas emplear en tus salidas. Siempre es importante llevar un equipo con las herramientas básicas para poder actuar en plena actividad si es necesario.
Instrucciones para hacer el mantenimiento de una bicicleta
Para lograr saber cómo hacer el mantenimiento de una bicicleta es necesario tener en cuenta una serie de recomendaciones básicas, las cuales te vamos a indicar a continuación:
- Limpia la transmisión. Lo ideal es llevar a cabo una limpieza de la transmisión tras cada salida, es decir, los platos, el cambio trasero, el casete y la cadena. El aceite sucio y la acumulación de partículas hacen que se acelere el desgaste de todos los componentes. También se recomienda aplicar desengrasante, esperar unos minutos; y luego limpiar con agua caliente y un cepillo para eliminar los restos de suciedad y aceite.Una vez que esté todo limpio y seco, tendrás que aplicar aceite en la cadena, haciendo pasar la cadena por las diferentes velocidades y limpiar el excedente de aceite con un trapo limpio. Es importante que el desengrasante y el aceite sean productos especialmente diseñados para bicicletas y de alta calidad. Además, es necesario revisar de vez en cuando cómo se estira la cadena.
- Revisa y mantén los tornillos bien apretados. Es muy fácil y rápido y te ayudará a un buen mantenimiento. La revisión y el apriete de la tornillería de tu bicicleta te puede suponer más de un problema. Gracias a una llave dinamométrica que indica el par de apriete podrás revisarlos y comprobar que siempre se encuentre todo bien ajustado. Es importante revisar la potencia y el manillar, así como de los puntos de giro, tornillos de las bielas…
- Ajuste de la dirección. La dirección es uno de los puntos más fáciles de mantener. Desmontarla para luego limpiarla y engrasarla apenas te llevará unos minutos. Es recomendable hacer la revisión de la misma al menos una vez al mes, aunque todo dependerá del uso que le vayas a dar.
- Mantener un control de rodamiento de bujes. Este es uno de los apartados más delicados de mantener, ya que en función del tipo de buje será necesario optar por unas herramientas específicas; y además requerirá de un nivel de conocimiento mecánico. Si no usas la herramienta adecuada podrías llegar a dañar algunas de las principales piezas del sistema.Cambiar los rodamientos de un buje no es algo que suceda muy a menudo, pero la limpieza de los rodamientos y casquillos de forma externa; y aplicar un poco de grasa, es algo que no es demasiado laborioso y te permitirá incrementar su durabilidad.
- Horquilla y amortiguadores. El mantenimiento tanto de los amortiguadores como de las horquillas es aconsejable que se realice siempre en tiendas de profesionales. Se trata de componentes que son delicados y por ello es necesario tener conocimientos avanzados.Sin embargo, lo que sí que podrás hacer es limpiar la suciedad de los retenes; engrasarlos ligeramente; y limpiar las barras para evitar que se rayen. También puedes limpiar los diales de ajuste.
- Tubeless: El sistema tubeless es cada vez más utilizado, ya que ayuda a prevenir pinchazos entre otras ventajas, pero hay que tener que su líquido se deteriora y seca con el paso del tiempo. Por ello es conveniente cambiarlo y limpiar el interior de la llanta y el neumático al menos una vez al año.
- Mantenimiento de los frenos de disco: Los mantenimientos de los frenos de disco tienen un mantenimiento sencillo de llevar a cabo. Es necesario comprobar el estado de las pastillas de freno. En el caso de que estén gastadas será necesario sustituirlas, y si no será necesario limpiar la superficie de frenado. Para ello se empleará un papel de lija fino. Además es necesario limpiar el disco con productos especiales.
