Cómo controlar el TDAH de manera natural
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¿Cuántos niños has conocido que los etiquetan de rebeldes, de necios o de malcriados, pero que pareciera haber algo más detrás de eso? Muchos de esos niños inquietos tienen TDAH, un trastorno muy común que pocos conocen realmente. Se trata de una alteración en las funciones ejecutivas de base neurológica que inciden en el comportamiento de un niño.
Según la OMS el TDAH se trata de un desorden neuroquímico con raíz biológica de sintomatología crónica, la cual afecta la conducta del paciente en todas sus áreas, especialmente en la académica. Esto se debe a malformación neurológica, problemas en el parto, nacimiento con cuadro de hipoxia, enfermedades virales durante el embarazo, consumo de drogas de la madre cuando estaba embarazada y por condición genética hereditaria.
Los métodos terapéuticos tradicionales para tratar estos niños por muchos años se han centrado en la medicación farmacológica para controlar las crisis. Sin embargo, ya se ha comprobado que el exceso en el uso o el uso innecesario de fármacos en niños con TDAH, en vez de mejorar la condición, suelen empeorar y hasta retrasar la evolución positiva de los pacientes.
Si es posible manejar una condición de Trastorno por déficit de atención e hiperactividad de manera natural sin optar por medicación farmacológica. El estrés que viven los padres de los niños y adolescentes que padecen este trastorno los lleva a acudir a buscar en tantos profesionales en psicología una respuesta que todo puede llegar a convertirse en un caos; por lo cual tienden a dejarse llevar por la medicación farmacológica para poder sobre llevar todo lo que implica vivir con todos los factores que intervienen en la vida de un núcleo familiar incidido por el TDAH.
Quizá estés esperando alguna dieta alimentaria o recetas de remedios caseros; pero no. Este post se trata de decirte la verdad: el abordaje asertivo del TDAH depende de la aceptación de la condición de tu hijo, tu autocontrol y el amor que expreses. Por supuesto que una alimentación alta en azúcar estimula la hiperactividad; obviamente el sobrepeso infantil está relacionado con niños ansiosos o deprimidos, pero esos son comorvidades, no son el centro del problema. El problema no es el niño, el problema es cómo lo tratas.
Instrucciones para controlar el TDAH de manera natural
Para el manejo del TDAH en, termino de pautas y estrategias, no tiene por qué implicar siempre una medicación farmacológica. Por lo tanto, conocer las técnicas naturales de manejo de situaciones específicas es fundamental para conservar la salud física y mental de todos los miembros de la familia que rodean al niño o adolescente diagnosticado con este trastorno.
Por lo general, las personas que padecen este trastorno tienen un coeficiente intelectual que compensa su déficit de atención; por lo cual pueden llevar una vida académica más o menos normal, siempre y cuando tengan el apoyo de sus padres o cuidadores. Además, la impulsividad puede llegar a ser una característica muy específica de los que los padecen; por eso la paciencia que los familiares deben tener es fundamental.
Los especialistas indicados para diagnosticar esta condición son los psicólogos clínicos, neuropediatras, neuropsicólogos y psiquiatras. Las competencias académicas necesarias profesionalmente para poder hacer un diagnóstico acertado son muy importantes para poder llegar a una terapia adecuada; por ello, no se trata de llevar a un paciente a cualquier consulta y ya; se trata de un seguimiento interdisciplinario de la mano con el pediatra de cabecera de la familia, como también el seguimiento psicopedagógico del colegio o jardín.
Por otra parte, el desorden desafiante oposicional es una condición de comorvidad muy típica de los niños diagnosticados con TDAH. Por lo tanto, es fundamental que las personas que estén a su cuidado conozcan estrategias adecuadas para que de manera oportuna puedan ayudar a su niño. Si no se sabe manejar la frustración del niño, se puede limitar muchas veces el desempeño académico y la madurez en el lenguaje. Si te le enfrentas como persona dominante el desorden oposicional se va a acentuar; por ello es mejor tratarlos desde la argumentación y la lógica y no desde la imposición.
¿Que necesitas para controlar el TDAH de manera natural?
Un niño TDAH necesita medicación farmacológica solamente cuando después de la evaluación diagnóstica certificada, donde evaluada su historia evolutiva clínica esté relacionado con episodios de epilepsia. Cuando los síntomas son muy agudos y a criterio del neuropediatra, entonces tomará medicamentos.
Lo más importante es conseguir un diagnóstico adecuado. Los síntomas principales de un niño con TDAH son la inatención, la impulsividad y la hiperactividad. Aunque pueden no presentarse todos. Son niños bruscos, inquietos en exceso, impulsivos, que no tienen premeditación en sus acciones, le cuesta mucho concentrarse en una sola cosa y, por lo tanto, les cuesta comprender procesos complejos o actividades complejas.
Por otra parte, es importante que sepas que generalmente tienen comorvidad con el autismo, la depresión, la ansiedad, trastornos del sueño, trastornos alimenticios, dificultades del aprendizaje, dificultad del lenguaje, trastorno opositor desafiante y en funciones ejecutivas como la memoria operativa o problemas motrices.
Consejos para controlar el TDAH de manera natural
- Entiende que solamente tú como padre, madre o cuidador puedes ayudarlo a aceptarse a sí mismo. Es un ser atípico, pero eso no lo hace malo, ni discapacitado. Solamente es diferente, tiene una sensibilidad dilatada y no sabe cómo manejar sus emociones ante las sensaciones que el mundo le produce.
- No le digas que es inquieto, necio o tremendo, ellos tienen demasiada energía, ayúdalos a canalizarla con deportes o juegos.
- Acepta su condición, ya no te niegues más a la realidad para poderlo ayudar. No necesitas sobreprotegerlo ni compadecerlo, solo tienes que aceptarlo con amor.
- No le digas que es distraído o bruto, recuerda que tienen una dificultad real para concentrarse. Como ya sabes que le cuesta prestar atención, tenle paciencia.
- Valora lo bueno que tiene tu niño con TDAH. Cree en él, en sus capacidades, en lo que puede hacer a su tiempo; provéele recursos para que se auto supere.
- No le digas que es un payaso. Le encanta llamar la atención y hacer reír a los demás, es una manera de mediar su frustración.
- Recuerda que no todos tenemos las mismas habilidades, ubícalo en su individualidad para mejorar su autoestima y su seguridad, utilizando un lenguaje con cariño en plural. Por ejemplo, mejor dile “vamos a dormir, cariño” no le digas “vete a dormir ya”.
- No le digas desordenado, ayúdalo a manejar su tiempo porque casi nunca le va a alcanzar el tiempo para realizar sus tareas.
- Si tú gritas le das mal ejemplo. No pidas lo que no das. Modula tu voz para que demuestres respeto y amor.
- No lo lleves a la recriminación, a la comparación ni al castigo físico; no lo censures ni etiquetes, trata de mediar para que él pueda analizar las consecuencias de sus acciones, trata de conseguir alternativas juntos para mejorar su conducta.
- Involúcralo en actividades artísticas para que se relaje y se inspire. Ten siempre a la mano plastilina, colores, pinturas, arcilla y materiales de ese tipo.
- Recuerda: entre más lo criticas más fracasa; mientras más fracasa menos motivado estará a mejorar. Ayúdalo a no ver el fracaso desde la frustración, anímalo a superarse a sí mismo cada día un poco más. No esperes a que su condición se agudice tanto que realmente se convierta en una discapacidad mental, al punto de internarse en un hospital psiquiátrico por el peligro a que se suicide.