Cómo saber si tu ginecólogo tiene un comportamiento red flags
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Puesto que todos los seres humanos somos diferentes, es completamente normal que, en ocasiones, haya quienes digan o hagan cosas que no nos agraden del todo. Por ese motivo, solemos seleccionar muy bien a las personas que dejaremos que permanezcan a nuestro círculo más cercano, como los amigos y la pareja.
Por lo general, solemos escoger como amigo a aquella persona que comporte con nosotros ciertas cosas, como los gustos, las opiniones, las metas, la forma de ver el mundo, la religión, etc. Ya que esto nos hace sentir más cómodos y a gusto.
Lo mismo puede decirse de la pareja sentimental. Compartir cosas en común hace que la relación sea más sólida y estable y que tengamos perspectivas a futuro con esa persona. De lo contrario, la relación terminaría en menos de lo que canta un gallo.
Por supuesto, como es de esperarse, ninguna relación es perfecta. Siempre van a haber aspectos en donde vamos a diferir de otros. Es aquí en donde entra en juego la tolerancia y el respeto. Sin embargo, hay comportamientos y situaciones que no se pueden tolerar. Claro, esto dependerá de la persona y las circunstancias.
En la actualidad, en las redes sociales se ha comenzado a implementar un término que ha ganado popularidad rápidamente. Se trata del Red flags o, como se traduce en español, Banderas rojas. Este término alude a cierto comportamiento que enciende nuestras alarmas. Algo que nos hace ver que las cosas no están marchando del todo bien y, por lo tanto, es necesario tomar medidas y alejarse.
Las red flags se aplican a cualquier tipo de relación, ya sea personal o laboral. En vista de esto, ¿cómo saber si tu ginecólogo tiene un comportamiento red flags? ¿Qué debes tener en cuenta a la hora de seleccionar tu médico tratante?
Instrucciones para saber si tu ginecólogo tiene un comportamiento red flags
Aunque es cierto que todos, en algún momento, estamos expuestos a cualquier tipo de violencia, la mujer tiende a ser más vulnerable debido a su fisionomía natural. Estas agresiones pueden ir desde propuestas fuera de lugar hasta tocamientos inapropiados.
Con frecuencia, muchas mujeres deben hacerle frente al acoso sexual. Esta es una situación que pudiera presentarse en diferentes ámbitos, lo que incluye la atención médica. En vista de esto, es completamente normal que, en determinado momento, llegues a sentir un poco de temor y de desconfianza.
Toda mujer, al llegar a cierta edad, debe comenzar a visitar un médico ginecólogo. Esto, con la finalidad de evitar ciertas enfermedades comunes y de estar al tanto de que todo marcha bien. Anteriormente, era común escoger como ginecólogo a una mujer, pues eso permitía que se sintieran más cómodas.
No obstante, puesto que el mundo va cada vez más de mal en peor, en cuanto a la moralidad, hoy día los agresores sexuales pueden ser de igual o diferente sexo. En vista de esto, ¿cómo puedes saber si tu ginecólogo tiene un comportamiento red flags? ¿Qué señales deben encender tus alarmas?
Es cierto que, en ocasiones, pudieras llegar a dudar y tal vez pensar que estás exagerando un poco las cosas. No obstante, si algo de lo que dice o hace tu médico te hace sentir incómoda, de seguro algo va mal.
Ten en cuenta que existen límites que ningún médico puede pasar. En caso de que detectes algunas de ellas, lo más recomendable es que cambies de ginecólogo de inmediato y, de ser necesario, que pongas una denuncia oficial.
Algunas de las red flags que no debes permitir, por nada en el mundo, son:
- El médico insiste en realizarte un examen pélvico siendo aún menor de edad y sin justificación aparente. Ten en cuenta que este tipo de exámenes no son recomendables para mujeres menores de 21 años, excepto en casos concretos, como cuando se presenta dolor o sangrado anormal. En caso de que sea necesario, siempre debe ser bajo tu consentimiento y en presencia de uno de tus padres o representantes.
- No usa guantes para examinarte. Durante todo examen interno, el médico está en la obligación de usar guantes. En caso de que no pretenda usarlos, no dejes que te examine.
- No te ofrece explicaciones sobre el procedimiento que llevará a cabo o no te consulta antes de realizarlo. En este caso, estás en todo tu derecho de terminar inmediatamente con la consulta. Lo mismo puede decirse cuando realiza tactos inapropiados o algún procedimiento que te cause dolor.
- Cuando hace algún tipo de comentario del tipo sexual o provocativo. Lo mismo aplica si comienza a juzgar tus prácticas sexuales o vida sexual.
- Hace que te desnudes completamente o te pide que lo hagas. Es importante que tengas en cuenta que el médico puede explorar distintas partes de tu cuerpo, como los senos o la pelvis. No obstante, mientras examina una, la otra debe estar completamente cubierta.
Si te pide que te acuestes desnuda en una camilla, esta es una solicitud que no puedes aceptar, pues está, por completo, fuera de lugar.
¿Que necesitas para saber si tu ginecólogo tiene un comportamiento red flags?
Al conocer lo que se considera como normal en una consulta ginecológica, podrás detectar, con más facilidad, las red flags y tomar medidas al respecto. Algunas de las cosas que debes esperar son las siguientes:
- Los exámenes ginecológicos de rutina, para una persona que sea menor de 21 años, no incluye la realización de un examen pélvico interno, a menos de que existan algunas preocupaciones específicas.
- A fin de revisar los órganos internos de la paciente, el médico le pedirá que se acueste en la camilla con las rodillas dobladas y que coloque los pies en los estribos que se encuentran ubicados en la base de la mesa.
El médico introducirá 1 o 2 de sus dedos en la vagina, pero estos siempre deben estar enguantados y lubricados. Su otra mano debe presionar el abdomen desde la parte de afuera.
- El médico siempre debe tener una buena comunicación con su paciente antes de la realización de cualquier examen. Asimismo, debe ofrecerle la presencia de un acompañante si esto hará que se sienta más cómoda.
- Aunque es cierto que los médicos deben y pueden preguntar acerca de la vida sexual del paciente, nunca debe hacer comentarios inapropiados o sexualmente provocativos.
- El propósito de conversar sobre tu sexualidad es que el médico pueda determinar cuál es la atención que debe brindarte.
- El médico solo debe realizar contacto físico con la paciente siempre y cuando sea necesario. Debe ser mínimo.
- En caso de que sientas que algo no va del todo bien, debes decirlo.
Consejos para saber si tu ginecólogo tiene un comportamiento red flags
Ahora bien, ¿qué debes hacer en caso de que sientas que has sido abusada durante una visita a tu médico ginecólogo? Algunas de las cosas que te pueden ayudar son las siguientes:
- Confía en tu instinto. Si en algún momento de la consulta te sientes incómoda o crees que lo que está sucediendo es incorrecto, confía en ello. Incluso, si solo se tratase de un malentendido, todos pueden aprender de ello acerca de la importancia de la comunicación franca.
- Puedes hacerlo acudiendo a la fiscalía de distrito par presentar cargos criminales o acudiendo a la junta médica estatal.
- Habla con otros. Por ejemplo, un abogado puede darte la orientación que necesitas para determinar si se puede proceder con un caso civil contra el médico tratante. En caso de requerir apoyo emocional, puedes visitar a un terapeuta o consejero de crisis por violación.
- Luego de hacer la denuncia oficial, asegúrate de hacerle el debido seguimiento a la misma. Hacer esto, no solo te permitirá conocer que el procedimiento va por el camino correcto, sino que, con esta acción también puedes ayudar a posibles futuras víctimas, pues estarás sentando un precedente.
Visitar al médico no solo es una necesidad, sino también un derecho del que no puedes cohibirte. Por ello, toma en cuenta las red flags que te he mencionado en este post para sentirte más segura en tu próxima consulta ginecológica.