Cómo hacer zumo de Aloe Vera
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El Aloe Vera o Sábila, es una planta que se ha hecho enormemente famosa durante los últimos años gracias a las propiedades reparadoras de su sabia. Sus propiedades curativas y medicinales han permitido que dé el salto al mundo de las farmacéuticas y de los cosméticos. No es extraño encontrar cremas con un alto contenido concentrado de esta planta para reparar la piel, las estrías y evitar quemaduras o para hacer frente a problemas intestinales. Tampoco es raro encontrarla para fines alimenticios. Muchos pueblos usan el Aloe Vera para comer.
Y no se trata precisamente de una moda pasajera. En el Antiguo Egipto ya eran conscientes de las propiedades tan saludables de esta planta, hasta tal punto que quedaron registradas en las paredes de los templos egipcios durante el IV milenio A.C.
El Aloe Vera es una variedad de la familia de los Aloes. Actualmente hay registradas unas 250 variedades pertenecientes a esta familia, pero sólo 3 o 4 poseen características medicinales importantes. Entre estas se encuentra precisamente el aloe vera.
Es habitual hallarlas en sitios calurosos, pues son unas plantas asociadas a climas desérticos. De hecho, parece ser que proceden de Arabia. No obstante, sobreviven bien en las terrazas. Nosotros, que vivimos en Madrid, tenemos dos tipos diferentes en casa y han alcanzado una altura vertiginosa en tan solo 3 años. Una de las variedades, además, echa flor todos los años. Para que crezcan felices lo ideal es que estén a temperaturas superiores a los 10º. Nosotros hemos descubierto que el sol directo oscurece sus hojas y que el frío del invierno no las estropea, pero es mejor mantenerlas resguardadas del aire aunque se queden en la terraza durante las bajas temperaturas.
Zumo de Aloe Vera
Un solo aloe se reproduce hasta la saciedad. Ya hemos hecho esquejes para todos los vecinos y familiares que conocemos. Sus hojas son enormemente carnosas y su jugo es altamente curativo. Si las aplicas directamente sobre la piel, por ejemplo, después de depilarte, verás cómo mejora y evita las rojeces. En cambio, si decides preparar con ellas un jugo, podrás luchar contra las malas digestiones o los dolores gástricos. Olvídate desde hoy y para siempre de padecer dolor de estómago gracias a esta maravillosa planta. Aunque puedes encontrar a la venta en casi cualquier herbolario o supermercado zumo de aloe vera, nosotros vamos a enseñarte a que lo hagas tú mismo. De esta manera te aseguras que es 100% natural y no está adulterado con conservantes, colorantes u otro tipo de productos químicos.
Te recomiendo que te hagas con un esqueje y comiences tu propia plantación. Son súper agradecidas y muy bonitas cuando crecen. Aunque te advierto de que una de nuestras macetas ya debe de pesar unos 35 – 40 kg entre la tierra y la planta, así que ten por seguro que va a crecer y mucho. Tendrás que trasplantarla por lo menos una vez en su vida. Sin más dilación, veamos cómo hacerlo.
¿Que necesitas para hacer zumo de Aloe Vera?
Vamos a necesitar
- 1 planta de Aloe Vera
- Miel (opcional)
- 1 naranja
- ½ limón
La receta que vamos a darte a continuación es para 1 persona. Aumenta el número de frutas y aloe vera de forma proporcional si quieres hacer más cantidad
Instrucciones para hacer zumo de Aloe Vera
Paso a paso para su elaboración
- Cortamos una par de tallos no muy grandes de Aloe Vera. Cuando tengas la tuya propia verás que tienden a crecer muy juntas y formando como pequeñas colonias. Intenta coger de los laterales para evitar hacer daño a la planta y córtalas lo más cerca posible del tallo. En cuanto cojas una con las manos verás que comienzan a soltar una especie de sustancia gelatinosa. Su aspecto tan abultado es precisamente porque tienen un corazón carnoso compuesto de esa sustancia. Será esta sabia la que utilicemos para nuestros zumos y tratamientos estéticos.
- A continuación, los lavamos en el fregadero para eliminar los restos de polvo que puedan tener por estar al aire libre. Los secamos con cuidado usando un paño de cocina.
- Después, situamos los trozos en una tabla de madera y eliminamos con cuidado las pequeñas espinas que tienen raspándolas ligeramente con un cuchillo. Aunque no pinchan, de este modo evitaremos hacernos daño sin querer.
- Una vez recortadas, cogemos el cuchillo y trazamos una línea desde la base hasta la punta de la hoja justo en la mitad de cada una de ellas. De esta manera conseguiremos abrirlas fácilmente con las manos y extraer su jugo. Sólo nos interesa la sustancia gelatinosa. No te lleves sin querer la capa amarilla que se sitúa debajo de la corteza. Puede provocar descomposición y diarrea.
- Con una cuchara, recogemos el líquido y lo echamos en un vaso medidor con cuidado. Resérvalo.
- A continuación, partimos a la mitad una naranja y un limón. En un exprimidor, exprimimos las dos partes de la naranja y una de limón. Después vertemos el zumo que hemos preparado en el vaso medidor.
- Ahora ya sólo nos queda licuar todos los ingredientes hasta que casen con corrección. Si quieres, puedes añadir una cucharada de miel para hacer su sabor más dulce y delicioso. Ya tendremos listo nuestro zumo energético perfecto para hacer frente a los catarros y evitar dolores de estómago.
- Si te sobra aloe vera, puedes mantenerla en el frigorífico sin problemas. Sólo necesitas cubrir con papel albal la parte que quedó expuesta tras el corte y de la que escurre la gelatina.
yo ya la suelo utilizar de vez en cuando, es muy buena
yo lo utilizo mucho, pero donde mas en al salmorejo, disimula su sabor, que no es muy agradable, pero lo consumes.