Trucos para cuidar tu alimentación en verano

Para poder mantener una salud adecuada, es importante mantener una alimentación adecuada, y tras explicarte cómo es la pirámide alimentaria, así cómo la forma en la que se pueden seguir dietas para bajar de peso o para acelerar el metabolismo, te vamos a dar una serie de trucos para cuidar tu alimentación en verano.

En esta época del año se disparan las compras y consumo de bebidas refrescantes y cerveza, así como de comidas poco apropiadas como los dulces y los helados. Una mala alimentación propia de esta época del año, sumado a que las personas dejan de hacer ejercicio, acostumbra a suponer un aumento de peso de entre 3 y 5 kilogramos.

La alimentación en verano se ve afectada por los cambios de hábitos alimentarios, y es que con el periodo estival y las vacaciones, suelen abandonarse parcial o totalmente los horarios de las comidas y las costumbres saludables, y todo ello puede tener sus consecuencias sobre nuestra salud. Dicho esto, a continuación te vamos a dar una serie de consejos a seguir para que puedas alimentarte de una manera oportuna.

La importancia de la hidratación

En muchas ocasiones seguro que has escuchado a los expertos hablar de la importancia de mantener una adecuada hidratación en el cuerpo, que es fundamental en las dietas de adelgazamiento para así poder conseguir una eficaz pérdida de peso. En verano cobra aún más relevancia, ya que tanto la humedad como el calor pueden provocar que se favorezca la deshidratación de nuestro organismo.

Para poder mantener un nivel de hidratación adecuado, se necesita ingerir entre 1,5 y 2 litros de líquidos diarios. No es necesario que sea agua, pero sí que se trate de líquidos saludables, tales como infusiones, limonada, zumos o refrescos sin azúcar.

Distribución de las comidas

Uno de los grandes problemas relacionados con la alimentación en verano tienen que ver con los horarios de las propias comidas. De hecho, es habitual que se dejen de lado hábitos muy recomendados como el de hacer cinco comidas ligeras diarias, ya que en muchas ocasiones las actividades que realizamos y el ritmo de vida durante el periodo estival afectan de forma notable a los horarios.

En este sentido, es importante saber que si se pasan muchas horas sin comer, es probable que se llegue a padecer de cierta hambre o ansiedad, y a su vez esto provoque la ingesta de alimentos poco o nada saludable, o bien a comer en exceso en las principales comidas.

Frutas y verduras

Las frutas y verduras en esta época del año se caracterizan por ser bajas en calorías y muy ricas en agua, por lo que la ingesta puede ayudar a mantener un buen estado de hidratación. De igual forma, si haces algún tipo de dieta enfocada a perder peso, este tipo de alimentos te ayudan a la hora de controlar tu alimentación.

Es imprescindible que estos formen parte de tu dieta, ya que contienen muchos minerales, fibra y vitaminas. Asimismo, destacan por ser muy ligeras, lo que favorece su digestión. Por otro lado, siempre que sea posible, se recomienda consumirlas en crudo para que estas puedan conservar todos sus nutrientes.

Evita las comidas copiosas

Durante el periodo de verano (y en todo el año en general, pero más en esta época), es recomendable evitar la ingesta de platos muy copiosos, así como grandes cantidades de alimentos, y esto se debe aplicar incluso aunque se trate de alimentos saludables.

De esta forma, se recomienda moderar la ingesta de carne roja y optar por el pescado, del cual se pueden consumir unas 5-6 raciones semanales. De igual forma, se debe reducir el consumo de grasa.

Sigue una dieta Mediterránea

A la hora de saber trucos para cuidar tu alimentación en verano, lo preferible es que sigas la dieta Mediterránea, la cual te ayudará a mantener tu organismo saludable, al mismo tiempo que previene el desarrollo de distintas enfermedades como la diabetes, la obesidad, enfermedades cardiovasculares e incluso algunos tipos de cáncer. También es de utilidad para todos aquellos que quieren adelgazar.

Esta dieta debe seguirse durante todo el año, no solo durante los meses de verano. Se trata de un plan de alimentación que usa el aceite de oliva como grasa principal, y que consiste en consumir a diario frutas, verduras, pan, cereales y legumbres, moderando la ingesta de carnes rojas, y evitando los alimentos procesos.

Modera el consumo de carne y ten cuidado con los postres

Al igual que sucede en las dietas de adelgazamiento, es aconsejable que durante el verano se modere el consumo de carne, limitando el consumo, sobre todo, de platos de carne roja, y optando, como ya hemos mencionado con anterioridad, por una mayor ingesta de pescado.

En lo que respecta a los postres, es posible tomar un helado para combatir el calor, pero debe ser de forma ocasional, y siempre que se busque la opción más saludable posible de acuerdo a su composición nutricional. En cualquier caso, siempre será preferible optar por postres lácteos o fruta, o por un sorbete o helado de hielo.

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