Relaciones Amorosas – Todo lo que has de saber
En una relación, cuando pasa a ser algo más y se convierte en amorosa, hay dos pilares fundamentales que no deben faltar. Porque precisamente, sin ellos, no sería una relación amorosa.
Cuando se habla de pareja, de una relación, debe tenerse en cuenta que no debe faltar ni el sexo, ni el amor. Si uno de los falta, algo está fallando en la relación… pasaría de ser una relación de amor, a una relación de amistad o fraternidad. Y eso, precisamente, es lo mismo a terminar con una relación amorosa.
No hay parejas perfectas… el amor perfecto, no existe. Las relaciones amorosas se trabajan. Es una combinación de sentimientos hacia la otra persona, fidelidad, comprensión y confianza. Entre otras cosas… que aquí, cada pareja es la que manda.
Instrucciones
- Hay que tener en cuenta cuando se empieza una relación, que puede funcionar o puede que no funcione… no se sabe si no se empieza y no se puede comenzar una relación amorosa, teniendo la idea preconcebida de que esa pareja será la definitiva, el amor de tu vida, te casarás, tendrás hijos… ese es uno de los grandes problemas en muchas relaciones. Se ponen expectativas exageradas nada más empezar una relación y conforme pasa el tiempo, empiezan los problemas. Hay que dejarse llevar y, sobre todo, ir conociéndose la pareja.
- Planear menos y dejarse llevar más. Cuando decides empezar una relación sentimental con otra persona, tienes que tener en cuenta que no sólo tienes que mirar por ti. También compartes tu vida con otra persona y esa persona, lo hace contigo. Por tanto, hay que dejar las cosas claras desde el principio de la relación. No engañar y si sabes que tu pareja tiene unos propósitos para el futuro y tú, no los compartes, es el momento propicio para decírselo. A la larga, una relación donde no se tiene un futuro o planes en común o un presente en común, termina por acabar de mal. Hay que ser realistas… por eso mismo, vive el presente y no te obsesiones tanto con el futuro. Lo que tenga que pasar, pasará.
- La sinceridad. La sinceridad es uno de los pilares fundamentales en cualquier relación de pareja. Cuando empiezan las medias verdades o las mentiras, es porque hay algo que no funciona entre vosotros. No pongas excusas… ¿te gusta que a ti te mientan? Entonces, ¿Por qué lo haces con tu pareja? Si mientes, es porque quieres ocultar algo. No importa si es bueno o malo. Pero algo ocultas. Si lo haces, es porque no tienes confianza plena en la persona de la que estás enamorada. Así que tienes un problema que a la larga (o corto plazo) sólo conseguirás que se entere, que desconfíe de ti y empiecen los problemas o el fin de la relación. Normal, porque lo primero que puede pensar tu pareja si sabe que le has mentido es preguntarse ¿Por qué me ha mentido, porque no ha querido contármelo, qué me oculta?
- Comprensión. Siempre hay que intentar ser comprensible con tu pareja. Hay que ponerse más en la piel de tu pareja y lo mismo viceversa. No sólo tu con tu pareja, sino que debe ser reciproco. Si una de las dos personas es siempre la que se pone en el lugar del otro, le escucha, le comprende, le aconseja, es su paño de lágrimas, le anima, etc. Al final, puede llegar a cansarse si cuando es ella/ el que lo necesita, no recibe lo mismo. Por tanto, tenido en cuenta, que no todos somos iguales y hay personas que son más empáticas y se les da mejor dar consejos, escuchar y ser más comprensibles, si se puede escuchar a tu pareja y que se desahogue. Preguntarle por sus cosas, preguntarle por su día a día, por sus problemas, apoyarle/a, etc.
- La fidelidad. Aquí hay que puntualizar que la fidelidad hacia tu pareja es siempre primordial para que la relación funcione o se rompa para siempre. Pero ojo, como ya hemos dicho, las parejas es sólo cosa de dos. De nadie más. Y como es evidente, entre ellos tendrán sus propias “normas”. ¿Qué queremos decir con esto? Que hay muchas parejas que son parejas abiertas. No son infieles, pero ven el amor de pareja de otra manera, mientras cumplan con lo que ellos han pactado. Entonces, es igual de válida la relación. Pero si tu relación de pareja no es abierta y no concibe tu pareja una infidelidad, cuidado. Siempre es mejor ser sincero/a y no mentir a tu pareja ni mucho menos, hacerle daño. Si tu pareja descubre que le has sido infiel y se lo has ocultado, es más que probable que jamás te perdona y la pierdas o le pierdas para siempre.
- Sé paciente. Uno de los problemas de mucha gente joven (sobre todo) es la falta de paciencia. Enseguida con cualquier problema, cuando algo no nos gusta, cuando hay pequeñas discusiones o rencillas… enseguida, se toma la determinación de mandarlo todo al traste y dejarlo. Eso es lo que pasa también con las relaciones, pero una relación no es una cosa ni objeto. Si la dejas tocada, de malos modos, es posible que esa persona no te perdone y la pierdas para siempre. Por eso, hay que intentar en medida de los posible, ser paciente. Tener más paciencia y ponerse en el lugar de la otra persona y si aun así, crees de verdad que no tiene razón o no quieres algo o crees que tienes razón, razónalo con tu pareja y si no es el mejor momento y estás en caliente, espérate a poder hablarlo con más calma.
- Comparte momentos con tu pareja. Compartir y pasarlo bien, es uno de los pilares que avivarán tu relación o la hundirán. Si no compartís momentos donde entre los dos os lo paséis bien, disfrutéis, desconectéis, riais, etc. No es excusa decir que no se tiene dinero y ponerlo como pretexto para no salir juntos ni hacer nada en común. Al final, se creará una rutina, que junto con los quehaceres del día a día como el trabajo, la casa, etc. mandarán al trasto la relación de amor. Hay muchas cosas que se pueden hacer que son muy simples, que son gratis, que podéis compartir. Dar paseos, ir a la playa, hacer un picnic, practicar deportes, ver películas, ir a cenar, a conciertos, de viaje, etc. Cualquier cosa que os guste a ambos. Haced cosas que sabéis que a vuestra pareja le gusta. Si podéis compartir esos momentos con la pareja, muchísimo mejor.
- Sexo. El sexo no debe ser un tema tabú. El sexo es lo que diferencia las relaciones entre una simple amistad o una relación amorosa. Habla con tu pareja de lo que te gusta y de lo que no te gusta. En el sexo, debe haber confianza entre ambos.
- Detallista. A todos nos gusta que tengan detalles con nosotros. Por lo tanto, si a ti te gusta, piensa que, a tu pareja, también le gustaría. Puedes demostrar el amor de muchas maneras… y una de ellas, es siendo detallista con tu pareja. Un simple detalle sin motivo ninguno, el típico detalle “porque sí”. No esperes a que sean fiestas señaladas como cumpleaños, navidades o vuestro aniversario. Un detalle por pequeño que sea o sin coste, se agradece mucho y hace sentir que tu pareja te estaba pensando y/o que te quiere. Son pequeños detalles que mantienen vivo el amor.
- No hay que generalizar ni comparar a tu pareja actual con parejas pasadas. Jamás. Si lo haces, piensa que puede ser lo mismo a la inversa. ¿te gusta la idea? Imaginamos que no… a nadie le gusta. Por tanto, cada persona es de una manera, todos somos diferentes y es posible que lo que le faltaba a uno, lo tenga otro y así con todo. Si estás ahora con esa persona, deja atrás el pasado. Si ya no estás con esa persona es porque no funcionó. Y si no paras de comparar o pensar en la otra persona, tal vez, es porque no lo tienes superado y deberías pensar si estás preparada/o para estar en una nueva relación. Tu pareja no se merece que le estés comparando constantemente. Valórala/e.
Que Necesitas
- Comprensión.
- Respeto.
- Cariño y amor.
- Sinceridad.
- Fidelidad.
- Paciencia.
Consejos
En las relaciones amorosas influyen muchas cosas. No es fácil que una relación dure en el tiempo, todo tiene sus rachas y sus etapas. Pero sí está claro que para que funcione, lo que no debe faltar es el amor. Amor y sexo. Porque no se trata de una relación de amigos, ni de familia, ni de conocidos… es una relación amorosa.
Tu pareja es tu compañero/a, así que compartir momentos juntos. Disfrutad, divertiros juntos, pasadlo bien, hablad, que no falte comunicación, ni el respeto, sinceridad ni la comprensión. Sin los pilares fundamentales de cualquier relación, puede acabar mal la relación. Valora a tu pareja y no cometas el fallo de compararle/a con otras personas o parejas.