Cómo actuar si te sorprende una riada o inundación dentro del coche
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Para poder disfrutar de una mayor seguridad al volante, conviene conocer cómo conducir en un atasco de forma segura, cómo hacerlo de manera segura con lluvia o cuando hay niebla, pero ahora te vamos a hablar de cómo actuar si te sorprende una riada o inundación dentro del coche, una situación delicada que puede llegar a ser muy peligrosa, y que se da con mayor asiduidad durante los meses de invierno.
A pesar de que para muchos pueda pensarse que es una situación propia de una película, hay situaciones inesperadas en las que puedes encontrarte con una inundación o riada mientras conduces. En este tipo de momentos es imprescindible mantener la calma, pero también saber la forma de actuar para salir ileso. Te contamos todo lo que debes saber.
El peligro de las riadas e inundaciones
Las riadas e inundaciones tienen un gran peligro para los conductores y para la población en general. Si nos centramos en los vehículos, hay que tener en cuenta que cualquier coche se puede ver arrastrado sin control. En ese sentido hay que tener claro que la velocidad de una riada suele encontrarse entre los 10 km/h y los 20 km/h; y que cuando alcanza una altura de 60 cm, esta será suficiente para arrastrar cualquier tipo de vehículo, sin importar su tamaño.
Aunque es una situación poco habitual, es necesario siempre saber cómo actuar en el caso de que se llegue a dar. De esta forma, teniendo en cuenta una serie de conceptos s indicaciones, podrás conocer la mejor manera para poder afrontar la situación y reducir los riesgos en estos momentos tan peligrosos.
Debes saber que cuando un coche se encuentra atrapado en una corriente de agua, hay un total de cuatro fuerzas que actúan sobre el mismo. Son la propia fuerza ejercida por la corriente del agua y que arrastra con ella al vehículo; la fuerza de agarre del coche, que va a en dirección contraria; el empuje vertical que actúa contra el agarre del vehículo y hace que tienda a flotar; y el propio peso del vehículo, que ejerce una fuerza hacia abajo. Una vez conocidas, es el momento de hablar de cómo actuar si te sorprende una riada o inundación dentro del coche.
Cómo salir del coche en caso de riada o inundación
Teniendo en cuenta lo anterior, si te encuentras en esta peligrosa situación, lo primero que debes hacer es valorar las diferentes posibilidades que tienes a tu disposición. La prioridad en este tipo de situaciones es la de tratar de salir del vehículo lo antes posible para ponerte a salvo. Para ello no te quites el cinturón de seguridad y contacta con los servicios de emergencia, para lo cual tendrás que llamar al 112.
Una vez puestos los hechos en conocimiento de los servicios de emergencia, llegará el momento de valorar las diferentes opciones disponibles para abandonar el vehículo. En el caso de que el vehículo esté parcialmente sumergido, no podrás abrir la puerta hasta que la presión del interior y la de la corriente del agua se igualen.
Si se da este caso, es aconsejable abrir la puerta en la misma dirección de la corriente. Si la profundidad no es suficientemente grande y puedes caminar por ella, acude a un lugar seguro lo antes posible.
Qué hacer si no puedes abrir la puerta
Si no puedes abrir la puerta para abandonar el vehículo que está en medio de una riada o inundación, tienes la posibilidad de bajar la ventanilla para salir por ella. Sin embargo, puede darse el caso de que se haya mojado el circuito eléctrico y no funcione.
En este tipo de casos, tus opciones pasarán por romper la ventanilla con algún objeto punzante. No obstante, antes de hacerlo deberás comprobar la dirección de la corriente, ya que es preferible romper la ventanilla del copiloto en el caso de que el agua llegue por el lateral del lado del piloto, de forma que se pueda subir al techo del vehículo para mayor protección.
Cómo actuar si no puedes salir por la ventanilla
Si no puedes salir por la ventanilla porque las circunstancias así lo impiden, puedes proar a tratar de hacerlo a través del parabrisas, un elemento que tiene una gran resistencia y que es difícil de destruir pero que sí se puede sacar. Para ello tendrás que ejercer fuerza con el respaldo, usando tu espalda y tratar de empujarlo con una patada sobre el parabrisas delantero. Tras sacarlo, sube al techo del vehículo para mayor seguridad.
El último recurso para abandonar el coche
Si ninguna de las opciones anteriores es posible, no te quedará más remedio que cruzar la riada. Para ello, trata de analizar bien la situación en función del tipo de vehículo que tienes, así como su altura y peso. Ten en cuenta que, por ejemplo, un todoterreno tiene más tracción en sus ruedas y más altura con respecto al suelo, por lo que ofrece una mayor resistencia en estas situaciones.