Cómo elegir el remolque perfecto

Muchos propietarios de un vehículo se encuentra en algún momento en la necesidad o deseo de contar con un remolque, si bien saber cómo elegir el remolque perfecto para cada caso en particular puede ser un tanto más complicado de lo que se pueda pensar, ya sea a la hora de adquirir uno nuevo, de segunda mano o simplemente alquilarlo.

¿Qué debes buscar al comprar un remolque?

Para saber cómo elegir el remolque perfecto para tu coche debes tener en cuenta algunos aspectos y factores, entre los cuales se encuentran los siguientes:

Características

Si buscas cómo elegir el remolque perfecto  debes pensar en la mercancía que vas a transportar, ya que dependiendo del uso que le vayas a dar podrás encontrar tipos de remolques más indicados.

Si necesitas de un remolque para transportar elementos que no tengan un gran peso, podrás optar por un remolque pequeño y que no requiera de frenos. Sin embargo, si necesitas transportar mercancías pesadas, deberás buscar un modelo de doble eje para que ofrezca mayor seguridad y estabilidad en el transporte.

Además, debes tener en cuenta el recorrido que vas a hacer frecuentemente con ellos, ya que no se tienen las mismas necesidades si se va a tratar de trayectos largos, donde un remolque grande es mejor; o si van a ser trayectos cortos, donde le opción preferible es la de optar por un remolque de tamaño inferior.

Vehículo

Una vez que hayas pensado en lo que vas a transportar y los trayectos que vas a realizar con tu remolque, debes asegurarte de que tu vehículo es apropiado para colocarlo. Es necesario que lo tengas presente ya que si haces una elección inadecuada puedes poner en peligro la conducción.

El vehículo debe encontrarse en perfectas condiciones y ser apto para poder utilizar el remolque sin desestabilizarlo. En función del vehículo del que dispongas podrás optar por un tipo de enganche.

En el caso de los todoterrenos y vehículos comerciales, es posible optar por cualquier tipo de enganche, ya sea de bola fija, mixta o extraíble. Por su parte, en lo que respecta a los turismos, es recomendable el uso de una bola extraíble como enganche, de forma que se pueda desmontar cuando no se vaya a autilizar.

Documentación y permisos

Para cumplir con el Reglamento General de Vehículos necesitarás cumplir con toda la documentación y permisos exigida para utilizar un remolque.

Si quieres saber cómo elegir el remolque perfecto deberás contar con la documentación adecuada para poder engancharlo a tu vehículo. En este sentido es importante ser consciente de que, si tienes el permiso B, solo puedes conducir un coche con un remolque de menos de 750 kg de masa máxima autoizada (MMA), es decir, los remolques pequeños; y siempre que, en total, el peso no sea superior a los 3.500 kg.

Sin embargo, si necesitas un remolque de un tamaño mayor, tendrás que obtener el peermiso B+E. En este caso, el coche y el remolque deberán tener un peso de entre 4250 y 7000 kg.

Materiales

El remolque debe tener una gran calidad para que pueda cumplir a la perfección con su cometido. Para ello deberás conocer los materiales que han sido utilizados para su fabricación.

En este sentido el acero y acero galvanizado es un material de gran resistencia, lo que hace que se utilice de forma habitual para este tipo de vehículos. No obstante, si estás buscando un modelo más ligero, el aluminio es una opción alternativa y, además, son más económicos.

Segunda mano o nuevo

Es posible que a la hora de hacer la compra dudes de si hacerte con un remolque nuevo o de segunda mano. Aquí dependerá de tu presupuesto y preferencias, ya que los de segunda mano son más económicos. Si vas a optar por uno de ocasión, asegúrate de revisara el remolque, tanto en su estado como calidad.

La ITV en el remolque

En el caso de los remolques ligeros que tengan un peso inferior a los 750 kg, se encuentran incluidos en el seguro del vehículo tractor, además de que no es necesario que superen la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). El remolque se encuentra incluido en la póliza correspondiente del vehículo y no tiene por qué estar dado de alta en la Dirección General de Tráfico (DGT).

En el caso de que sea un remolque de entre 751 y 3500 kilogramos, este debe incluir sistema de frenos, pasar la ITV y estar dado de alta en la DGT.

En lo que respecta a cuando se debe pasar hay que tener en cuenta que aquellos que hasta los dos años están exentos. Entre los 2 y 6 años pasarán la ITV cada dos años; de 6 a 10 años, pasarán la ITV cada año; y los remolques de más de 10 años pasarán la Inspección Técnica de Vehículos cada 6 meses.

Además, debes tener en cuenta que no es posible circular a más de 8 km/h en autovías y autopistas utilizando un remolque, mientras que en el resto de las vías se reduce a  70 km/h. En caminos, la velocidad máxima no puede superar los 25 km/h.