Cómo vibrar alto espiritualmente
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Existen personas que piensan que el mundo no solo es aquello que podemos ver, sino que también hay elementos inmateriales que están presentes y que influyen, de una manera u otra, en nuestras vidas.
Algunos creen que existen seres espirituales a lo que no podemos ver, pero que nos cuidan a lo largo de nuestra vida. También hay quienes afirman que, así como existe lo bueno, también está lo malo y, por lo tanto, usan amuletos para protegerse de hechizos, brujerías y todo tipo de artificios malignos.
Por otra parte, hay quienes piensan que todo lo que nos rodea está hecho de energía, incluyéndonos a nosotros mismos y, por lo tanto, es necesario rodearte de personas que tengan una energía positiva para que te vaya bien en la vida.
Lo contrario también es cierto, quienes tienen una mala energía, es decir, aquellos que son pesimistas, que siempre le ven el punto negro al pañuelo blanco, que solo hablan para derrumbar, pueden influir de manera negativa en nosotros.
Ahora bien, toda persona cuenta con un tipo de energía que lo caracteriza. En vista de eso, algunos suelen vibrar más alto, en sentido espiritual, que otros. Si eres de aquellos que tienen energía baja, no tienes de qué preocuparte. Puedes remediar la situación.
En este breve post, te estaré informando qué es lo que aconsejan los profesionales en la materia para que puedas llegar a vibrar alto en sentido espiritual.
Conocer esto marcará un antes y un después en tu vida diaria, te hará ser una mejor persona y te ayudará a construir mejores relaciones con quienes se encuentran en tu entorno. Además, aprenderás a lidiar con los problemas que surjan, sin que estos te roben la felicidad y las ganas de vivir. En pocas palabras, mejorará muchísimo tu calidad de vida.
Instrucciones para vibrar alto espiritualmente
Se cree que el mundo, en general, está constituido por energía vibratoria. De hecho, no solo nosotros somos energía, sino que también lo es lo que sentimos, lo que hablamos, lo que hacemos, etc.
Cuando las frecuencias vibratorias de una persona son bajas, están relacionadas con sentimientos y pensamientos negativos, tales como la ira, el miedo, el estrés, la crítica, la envidia, la burla, etc.
En cambio, las frecuencias vibratorias altas se relacionan con los pensamientos, las emociones y los sentimientos positivos, tales como el amor, la alegría, la compasión, entre otros.
Por ello, para saber cuál es la frecuencia en la que estás vibrando, debes preguntarte cómo te sientes. Si te sientes bien, optimista, alegre, entonces tus vibraciones son altas. No obstante, si te sientes mal, deprimido o iracundo, entonces estás vibrando bajo en sentido espiritual.
Sin embargo, puesto que no te encuentras aislado del resto del mundo, es normal que haya cosas a tu alrededor que terminen afectando tu energía. En este caso, es importante que aprendas a distinguirlas para que sepas cómo combatirlas.
Algunas de las cosas que afectan tu energía, para bien o para mal, son:
- Otras personas. La energía de otros puede afectarte muchísimo. De hecho, en ocasiones, puedes llegar a apropiarte de ellas sin darte cuenta. Si se trata de una energía alta, también terminarás vibrando alto. Sin embargo, lo contrario también es cierto y se puede convertir en un verdadero problema.
- Los lugares. Hay lugares que hacen que te conectes con una buena energía, como los parques, las playas, etc. Mientras que hay otros que te dejan con la energía por el suelo, como los cementerios, los espacios muy concurridos y con mucho ruido, entre otros.
- Las situaciones. A diario vivimos diferentes situaciones que nos exponen a diferentes frecuencias de energías, como una mala noticia, un accidente, un cambio de circunstancia repentino, una discusión, etc.
- Los alimentos. Al igual que todo lo que hay en el mundo, los alimentos también son una fuente de energía. Por consiguiente, algunos te darán energía positiva, mientras que otros solo ofrecen energía negativa. Esto tiene que ver con el estado natural o procesado en el que se encuentren.
- Las actividades. Existen actividades que te ayudan a vibrar muy alto, mientras que otras no, ya que no es lo mismo hacer algo por obligación que por gusto o placer. Por ejemplo, generalmente, trabajamos por compromiso u obligación, pero escuchamos cierto tipo de música porque nos gusta.
Estas son tan solo algunos de los factores externos que afectan tu frecuencia energética. De ahí la importancia de que puedas conectarte con ella para que vibres alto, sin importar lo que ocurre a tu alrededor.
¿Que necesitas para vibrar alto espiritualmente?
Para vibrar alto espiritualmente:
- No te involucres con ningún tipo de comportamiento negativo. Existen diferentes comportamientos que, aunque pueden parecer placenteros o satisfactorios, son temporales y, tarde o temprano terminan considerándose como un error. De hecho, muchos de ellos podrían llegar a destruir nuestras vidas.
- Esfuérzate por disfrutar lo que estás haciendo, sin importar si te gusta o no, o si es tu fuerte o, por el contrario, te exige un mayor esfuerzo. Experimenta la alegría de ser productivo, tanto para ti como para los tuyos. Cuando llegas a sentirte eficiente, enfocado y responsable, entonces ya estás comenzando a vibrar alto.
- Aléjate de los chismes. Puesto que ahora eres más consciente del tipo de energía de cada persona, tienes la capacidad de alejarte de aquellas que pudieran llevarte a sostener conversaciones tóxicas o a esparcir chismes, pues son personas cuya energía vibratoria es muy baja y puede llegar a afectarte.
- Preocúpate más por el prójimo. Cuando comienzas a vibrar alto, entonces también aprendes a mantener relaciones sociales más fuertes y estables, lo que implica cuidar mejor a quienes amas y conectarte mejor con los que están en tu trabajo.
- Aprecia todo lo que tienes, lo que incluye cada uno de los días que vivas. Mira las cosas con otros ojos y usa su energía positiva para influir en otros de la mejor manera. Recuerda que ser agradecido es el primer paso que te llevará hacia la realización personal y el éxito.
Consejos para vibrar alto espiritualmente
Para vibrar alto en sentido espiritual, debes conectarte con la energía que emana de ti, esa que está en tu interior. Para ello, bastará con que realices un pequeño ejercicio que te llevará un par de minutos.
- Lo primero que tienes que hacer es ubicar un espacio y un momento en el que puedas estar a solas y libre de interrupciones, como el teléfono, el televisor, otras personas, ruidos externos, etc.
- Ponte lo más cómodo posible para lograr relajarte.
- Coloca tus manos en tu pecho, tu vientre, tu plexo solar o cualquier otro punto que consideres que es tu centro.
- Conéctate con tu respiración. Procura que cada vez sea más lenta, suave y profunda.
- Cuando sientas que has podido relajarte un poco, será el momento para preguntarte cómo te sientes. No te angusties si la respuesta no es lo que esperas. El propósito es que puedas observar el estado en el que te encuentras.
- Observa lo que emerge dentro de ti y pregúntate si eso es realmente tuyo o ha surgido por la influencia de alguien o algo más.
- En caso de que sientas que proviene de algún factor externo, deshazte de él. Para ello, inhala y exhala hasta que lo hayas podido soltar.
- Luego, pregúntate nuevamente cómo te sientes y, si vuelves a conseguir algo que no te pertenece, respira hasta que te hayas deshecho de él.
- Cuando encuentres lo que sí proviene de ti, aférrate a ello, sin importar si es positivo o negativo, lo realmente importantes es que te estás sintiendo a ti mismo. Quédate contigo sin juzgarte ni culparte, sin tener miedo o angustia.
Hacer este ejercicio te ayudará a potenciar tu energía interna y a contrarrestar la energía externa negativa. De esta manera, conseguirás vibrar alto espiritualmente y llevar una vida mucho más placentera y gratificante. Aprenderás a vivir más y mejor.
