Cómo proteger el coche del calor

Mantener el coche en buen estado es algo fundamental para lograr que aumente su vida útil y haya menos posibilidad de que se produzca una avería. Para ello es clave saber cómo cuidarlo tanto en verano como en invierno, y en este caso te vamos a dar una serie de consejos y recomendaciones para que sepas cómo proteger el coche del calor.

Aunque pueda parecerte algo exagerado, el hecho de mantener un coche a la intemperie hará que tenga que enfrentarse a las temperaturas extremas, tanto en invierno como en verano. En muchas ocasiones no se le presta la atención que merece, pero realmente es importante seguir una serie de recomendaciones para así conservarlo en perfecto estado.

Antes de pasar a darte recomendaciones para que sepas cómo proteger el coche del calor de una manera eficiente, debes tener en cuenta que no son consejos que solo se deban aplicar en verano. De hecho, las altas temperaturas pueden llegar en otros periodos del año y pueden llegar a ocasionar graves daños en los automóviles, como pintura dañada, neumáticos cristalizados, gomas cuarteadas…

El hecho de que el habitáculo del coche se pueda llegar a convertir en un verdadero horno a temperaturas que incluso puedan superar los 50 grados, puede provocar daños en diferentes materiales; y además, estos también podrían llegar a liberar sustancias tóxicas para los seres humanos. Ten en cuenta nuestras recomendaciones para proteger el coche de forma eficaz.

Aparca a la sombra

A la hora de elegir un lugar en el que aparcar el vehículo es importante tener en cuenta la sombra. Siempre que sea posible se debe tratar de evitar el sol, de forma que no castigue a nuestro vehículo, ya sea cubriendo la sombra al mismo de forma parcial o total.

Si resulta inevitable aparcarlo al sol, es preferible hacerlo en aquellas franjas horarias en las que no incidan tanto los rayos del sol, evitando aparcarlo al sol entre las 12:00 y las 16:00 horas. Además, será aconsejable aparcar en un sentido u otro en función de la posición del sol.

Una recomendación es, que siempre que sea posible, se deje el coche a cubierto, en un parking subterráneo seco y debidamente ventilado. Sin embargo, también podrás dejarlos bajo la sombra de una superficie o de los árboles.

Usa parasoles, cortinillas…

Otro consejo a tener en cuenta para saber cómo proteger el coche del calor es recurrir al uso de parasoles, cortinillas, cubrevolantes y fundas, sin olvidar el hecho de las ventajas que supondrá usar lunas oscurecidas en la zona trasera.

Si el coche va a estar a la intemperie durante mucho tiempo, podrás poner una funda impermeable u opaca, aunque cualquiera de ellas le ayudará a la hora de quitarle calor.

Sin embargo, para estacionamientos cortos y rutinarios es preferible optar por otros sistemas como los parasoles, que mejor si son reflectantes; las cortinillas, ya sean fijas o enrollables (deben estar homologadas) o los cubrevolantes.

Apertura de ventanillas

Una duda habitual a la hora de proteger el coche del calor es si se deben abrir o no las ventanillas. Si se aparca en un garaje privado, se puede hacer con cada cristal bajado un par de centímetros para conseguir que el habitáculo se ventile un poco. Sin embargo, si en el exterior hace calor, la temperatura subirá. Además, siempre existe el riesgo de que puedan acceder al interior del vehículo diferentes insectos.

Si el calor interior es considerable, se pueden abrir las ventanillas y mantenerlas durante un rato para conseguir una renovación del aire. Una vez que el coche alcanza su temperatura de trabajo óptima se podrá conectar la climatización.

Techo solar y coches descapotables

En el caso de que dispongas de un coche descapotable o de techo solar, debes saber que este último puede ser un gran aliado a la hora de reducir el calor en el interior del vehículo, sobre todo si es negro o de color oscuro. En el caso de que no cuente con un aislante interior apropiado, lo habitual es que su efecto pueda llegar a ser contrario al que se desea, es decir, calor en verano y frío en invierno.

Los coches descapotables están bien para poder disfrutar al aire libre cuando la temperatura del exterior es moderada. Sin embargo, con un calor exterior excesivo, el interior también puede ser un auténtico horno, sobre todo si decides exponerlo al sol sin capota.

Aire acondicionado

Un último truco para poder saber cómo proteger el coche del calor es hacer un uso correcto del sistema de aire acondicionado. No obstante, hay que tener en cuenta que, por muy bueno que sea el sistema de climatización que tenga tu vehículo, conviene que no se active hasta que el vehículo se encuentre durante un rato en funcionamiento; y cuando la temperatura de trabajo es la adecuada, es decir, que el motor no esté demasiado frío, se podrá poner en funcionamiento.

Después habrá que elegir una temperatura interior adecuada, siendo recomendable ponerlo en la temperatura que se vaya a querer utilizar y no ponerla primero muy fría para luego subirla. Además, siempre que sea posible desactiva la recirculación de aire, de forma que el flujo llegue del exterior y haga que se pueda facilitar el enfriamiento del sistema.

¿Te ha gustado?

Deja un comentario

Tu dirección de email no será publicada.