Cómo jugar a los dardos

A la hora de pasar un buen momento en compañía de familiares o amigos existen muchas posibilidades a las cuáles podemos recurrir, desde jugar al póker hasta jugar al pádel o disfrutar de un juego de mesa como el Risk. En este caso te vamos a explicar cómo jugar a los dardos, un deporte que tiene muchos adeptos y que aunque pueda parecer sencillo, no lo es tanto, ya que necesita pulirse la técnica durante mucho tiempo para poder llegar a disfrutar de los mejores resultados.

Para aprender a tirar dardos es necesario dedicarle mucho tiempo al juego, pero también fijarse en los profesionales y abogar por la práctica para tratar de incorporar diferentes estilos y movimientos, de manera que encontremos el que mejor encaje con nosotros mismos.

La técnica en el lanzamiento de dardos

La técnica en el lanzamiento de dardos es fundamental para dominar el juego, y consiste en el movimiento que todos los tiradores usan para lanzarlos. Se trata de un movimiento que trata de seguir una curvatura propia del lanzamiento de un proyectil, empleando el brazo como palanca y el codo del lanzador como base.

En el momento de efectuar el lanzamiento del dardo se debe volcar hacia atrás la mano junto al antebrazo antes del mismo, para luego hacer que salgan disparados a modo de catapulta al tiempo que el dardo sale para dirigirse a la diana.

Recomendaciones

Es necesaria la práctica para poder evolucionar y saber cómo jugar a los dardos de la mejor manera posible. Por este motivo, te vamos a dar una serie de recomendaciones que guardan relación con la técnica de lanzamiento:

• Es recomendable tomar siempre una referencia fija en la línea de tiro, teniendo claro donde situar tanto el pie que está adelantado como el que se utiliza de apoyo.
• Es necesario mejorar día a día y continuar entrenando con máxima dedicación y esfuerzo. Una vez que se consiga una mecánica de lanzamiento lo suficientemente repetitiva, será el momento de tratar de conseguir que los dardos acaben estando agrupados de cada tres lanzamientos. En un principio es más importante que terminen agrupados a que lo hagan en un sector concreto de la diana.
• A medida que se va consiguiendo lo anterior, habrá que ir haciendo correcciones para mejorar la precisión. Para ello habrá que ir modificando poco a poco la altura del brazo y el giro del cuerpo. Hay que tener en cuenta que cualquier tipo de variación en la posición de la mano o el brazo tendrá un efecto importante, por muy pequeño que sea.
• Debes saber que no hay una manera única de coger el dado. Sin embargo, lo más usual es usar el dedo pulgar el corazón, que a su vez están ayudados por el índice y el anular, e incluso en algunas ocasiones por el meñique. En este caso, el pulgar se sitúa bajo el dardo, en el punto de equilibrio del mismo, el corazón por encima y un poco más adelante que el pulgar.
• A la hora de apuntar para hacer el lanzamiento se debe formar lo que aproximadamente será un ángulo recto con el brazo, de manera que la cola del dardo que se tiene cogido con la mano esté aproximadamente a la altura de los ojos; y la muñeca se mantendrá doblada hacia atrás, haciendo que el dardo se mantenga en posición horizontal con respecto al suelo. La altura del brazo, por su parte, depende del número al que se vaya a tirar, así como la propia altura del jugador.
• La posición del cuerpo depende del número al que se quiera tirar. Partiendo de una posición inicial, lo más recomendable es pivotar en lugar de moverse por la línea de tiro.
• El lanzamiento debe ser siempre consistente pero no fuerte, y se debe ejecutar con la máxima confianza, una seguridad que será clave para poder conseguir el mejor resultado.

El estado mental al jugar a los dardos

Más allá de los consejos técnicos ya mencionados, si quieres saber cómo jugar a los dardos debes tener en cuenta que, al igual que sucede en otros deportes que se necesita de la máxima puntería posible, ser capaz de poder aguantar la respiración durante unos momentos.

De esta manera hará que se minimice lo máximo posible otros movimientos del cuerpo, y al mismo tiempo que se consiga incrementar el nivel de concentración. Posteriormente tan solo habrá que soltar el brazo y la muñeca de una manera constante y uniforme. Al hacerlo hay que prestar atención para hacerlo con decisión pero no de una manera brusca. Debe quedar extendido apuntando a nuestro objetivo incluso durante unos instantes después de haber impactado el dardo con la propia diana.

Teniendo en cuenta todos estos consejos, tan solo tendrás que practicar hasta conseguir saber cómo jugar a los dardos de la mejor manera posible.