Cómo subir puertos de montaña de larga distancia en bicicleta

El ciclismo nos aporta numerosos beneficios con su práctica regular, lo que hace que cada vez sean más las personas que buscan cómo empezar en el ciclismo de montaña o cómo iniciarse en el ciclismo de carretera. Si ya tienes cierta experiencia en la bicicleta, te interesará saber cómo subir puertos de montaña de larga distancia en bicicleta, y te vamos a dar  toda la información que necesitas conocer para lograrlo con éxito.

Si vas a afrontar una gran subida en bicicleta en un puerto exigente debes tener en cuenta que hay que tener en cuenta una serie de recomendaciones para no sufrir más de lo debido. Te vamos a hablar de las diferentes facetas y consejos que debes seguir para saber cómo subir puertos de montaña de larga distancia en bicicleta.

¿Qué son los puertos de larga distancia?

Antes de saber cómo subir puertos de montaña de larga distancia en bicicleta es necesario saber realmente a qué nos referimos con ellos. Para un ciclista aficionado u ocasional, se puede hacer muy largo un recorrido de unos 4-5 kilómetros, pero para un competidor esta misma distancia es pequeña y podrá superarla sin dificultades.

Si hablamos del ciclismo fuera de competición, un puerto de larga distancia puede tener 8 km o más a una pendiente moderada del 5-7%. Si se tiene en cuenta la velocidad y el tiempo de ascensión, para poder catalogarlo de esta manera tendría que exigir que se inviertan entre 45 minutos y una hora pedaleando. Se trata, por lo tanto, de subidas que exigen de tener un gran fondo físico o resistencia. Por ello, es necesario conocer una serie de técnicas y consejos para conseguir lograr el objetivo fijado.

Cómo subir puertos de montaña de larga distancia

Existe un método que es muy práctico y útil para saber cómo subir puertos de montaña de larga distancia en bicicleta con éxito. Para ello habrá que dividir la zona de ascensión en varias partes o zonas.

Gracias a ello se podrá conseguir gestionar la energía de la mejor manera posible, llegando con fueras para afrontar la recta final. Al dividir mentalmente la ascensión podrás conseguir un ritmo más eficiente a la hora de escalar. Una buena estrategia es plantearse la subida en cuatro partes, rodando de menos a más: aproximación, base, zona intermedia, y cima o zona final. Te hablamos de cada una de ellas.

Zona de aproximación

Este es el periodo de los primeros kilómetros previos a la ascensión, los cuales acostumbran a ser llanos o con una pendiente ligera. En esta primera fase de la ascensión se recomienda seguir un ritmo vivo pero sin demasiada explosividad.

La intención de este primer tramo es que consigas la inercia suficiente para poder adaptar el desarrollo y pedaleo a la pendiente que vas a tener que afrontar sin tener que quedarte clavado sobre el firme cuando te encuentres en plena ascensión.

Base del puerto

Si nos encontramos ante un puerto de 8 kilómetros de longitud, los dos primeros se corresponderían con la base del puerto. Este es un momento muy importante de la ascensión del puerto de montaña de larga distancia.

Tras llegar con fuerza a las primeras cuestas y curvas no debes confiarte y deberás actuar de manera inteligente para reservar tu extra de energía, la cual a buen seguro necesitarás más adelante.

Será necesario que adaptes tu cadencia de pedaleo de forma progresiva a unos 70 rpm aproximadamente y trata de mantenerla siempre en este valor. En el caso de que no tengas un medidor de cadencia, podrás contar el número de pedaladas durante 15 segundos y multiplicarlo por cuatro para conocer los rpm aproximados. Lo que sí se recomienda es tener un cronómetro o cuentakilómetros para poder ver el tiempo al contar las pedaladas. Es clave tener el control para tratar de conseguir el mejor resultado a la hora de subir el puerto.

Zona intermedia

La zona intermedia, en un puerto de 8 kilómetros, se situaría entre los kilómetros 2 y 6, siendo una fase en la que es importante mantener el mismo ritmo de la zona anterior. En este momento nos encontraremos con un mayor desgaste, por lo que será de gran importancia tratar de ahorrar la mayor cantidad de energía que sea posible, sin relajarte.

Deberás rodar sentado sin tener que hacer movimientos bruscos. No te levantes del sillín para cambiar de ritmo si no es necesario, ya que esto lejos de ayudarte, hará que estés gastando más energía y fuerzas.

Un consejos si quieres saber cómo subir puertos de montaña de larga distancia en bicicleta y estas en esta zona es que a la hora de pasar por las curvas, utiliza el exterior, ya que la pendiente es más leve que en la zona interior. Este es un pequeño detalle que muchos dejan de lado pero que tiene una gran importancia a la hora de conseguir tener más fuerza para el tramo final.

Cima o zona final

Tras mantener un ritmo moderado en la zona intermedia nos encontraremos con la cima o zona final del puerto, que corresponderá a los últimos 2-3 kilómetros de subida. Tras haber gastado ya fuerzas en la parte anterior y el resto del recorrido, ahora será el momento de adaptar la cadencia y el ritmo  para poder rodar lo más cómodo que te sea posible, pero siempre sin perder demasiada velocidad.

Si has conseguido conservar fuerzas de las otras partes y crees que puedes tener un ritmo más alto, también podrás acelerarlo, aunque en este caso no lo hagas de forma brusca. Ten en cuenta que necesitarás fuerzas para acabar la ruta y además, siempre corres el riesgo de equivocarte y no ir tan bien rodando como pensabas.

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